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Una perfecta familia
Autora: Terry
Capítulo 23
Una vez que Lucas se calmo en los brazos de Mar, paso a brazos de su hermana y se sentaron juntos largo rato en silencio abrazados oyéndose nada más que los suaves sollozos de Lucas y los besos de María en su frente o sus mejillas y una vez que Lucas se hubo calmado del todo, María quiso contárselo todo pero no sabía cómo iba a reaccionar, asun asi, tenía que contarle la verdad.
María: Lucas cariño tengo que contarte algo – le dijo María haciéndole sentar a su lado – pero quiero que Mar esté presente – obviamente Lucas no sabía porque tenía que estar Mar presente, aunque algo le hizo clic en su cabeza, Mar era el novio de su hermana, a lo mejor estaba esperando un bebé por eso no pudo ir en todo el mes a visitarlo
Lucas: ¿Estás embarazada? – María abrió mucho los ojos sorprendida, nunca penso que la cabecita de su hermano volaría tan alto… tendría que cortar aquello, su hermano se estaba haciendo ideas equivocadas
María: No Lucas – negó rápidamente – sabes muy bien que no puedo tener hijos, más quisiera yo – le dijo triste
Lucas: Lo ziento pero como has dicho que quierez que ezté presente – pues ahora mismo ya no tenia idea que era de lo que su hermana queria hablar
María: Lucaz mi niño – dijo con cariño – como ya te dije antes, en ningun momento me olvide de ti, pero las cozas no zolo fueron por la documentacion de papá, han surgido otras zituaciones también… cozas que no tuve el valor decirte por carta o por teléfono, aun ahora tengo un poco de miedo porque no sé cual zera de tu reacción – le dijo acariciando sus manos
Lucas: ¿Mi reacción? – no entendía ni papa
María: Mejor que Mar este presente y te explicamos todo – respondió ella besando la cabeza de su hermano mientras María salió a buscar a Mar, quien entro con Toño, algo que tomo por sorpresa a Lucas, ¿quién era ese niño?
Mar: Lucas este es mi hijo Toño – dijo Mar apenas se pusieron al frente, colocando su mano en el hombro de su niño para agregar ya no mas – Toño el es Lucas, el hermano menor de María – Lucas se quedó sin reaccionar, Toño creyo que no le quería hablar pero Lucas en realidad estaba pensando que Toño no podía andar y algo en su corazón le hizo querer protejele, sintió mucha pena y el se estaba quejando porque su hermana no fue a visitarlo en todo el mes, pensando que Toño si tenía que estar enfadado con el mundo
Lucas: Hooola – saludo con la voz tan temblorosa que apenas le salía
Toño: Hola ¿te vas a venir a caza? – Lucas no entendió y María intervino enseguida
María: Lucaz cariño, zientate te tengo que contar algo – y Luca hizo lo que su hermana le pidió – Luki yo… yo hace un mes que estoy viendo con Mar – eso si le tomo por sorpresa a Lucas e iba a decir algo pero su hermana le tapó la boca – esa es la razón por la que no vine en todo el mez, no zabia como te lo ibas a tomar – y se hizo un espeso silencio, ninguno hablo porque estaban en espera de la respueta de Lucas – Luki cariño ¿no vaz a decir nada? – los tres esperaban una explosión por parte de Lucas pero no fue así
Lucas: ¿A cazo creías que no iba a querer que zeas feliz? – pregunto extrañado sintiéndose un poco culpable, quizás era demasiado dependiente de su hermana – es… ¿es por ezo no has venido?, ¿por ezo me has dejado aquí como zi no existiera? – agrego sentiendose traicionado por su hermana, eso le demostraba que no lo conocía, él nunca le recriminaba que ella fuera feliz – ¡vaya! – murmuro medio enfadado – parece que no me conoces hermanita
María: Luki mi niño – así es como le llamaba de cariño porque cuando era chico si le preguntaban cómo se llamaba él respondía Luki – no es ezo cariño, yo también estaba azuztada, para mi también a zio difícil lo de los papás y no zabia cómo llevar la situación – para eso a María le caían las lágrimas sin querer, pero no quería que su hermano la vea así, así que se las limpio rápido, pero eso no evito que su hermano se diera cuenta de que su hermana también estaba mal – perdona corazón, yo nunca quize hacerte daño – agrego y lo abrazo, Lucas también estaba vulnerable y también empezó a llorar; Toño miró a su papá y Mar le dio un beso en la cabeza
Lucas: Te perdono con una condición, que cuando vengaz a verme no me ocultes las cozas – solloso sin dejar de consolar a su hermana, fue ahí que Mar intervino
Mar: No Lucas, tu hermana no vendrá a verte – se apuro a decir, pero sin explicarse bien y Lucas abrió los ojos, sintiendo su corazón encogerse – mejor dicho, no va a venir porque hemoz venido a por ti, noz iremos a caza… ya no regresaras maz aqui – pero Lucas no quería ser ahora una carga para su hermana, ella hizo su vida y era claro que él sería un estorbo
Lucas: ¡No!, no hay necesidad, yo estoy bien aquí yo me quedo – en realidad él quería ecapar de aquel lugar, pero no iba decir aquello para no dañar a su hermana
Mar: No te estoy preguntando o haces tu maleta y después mando a por lo demás o te saco a rastras y te motivó para andar tu decides – dijo a manera de amanaza, una amenaza falsa, pero no iba a permitir que entre María y Lucas siguiera esa barrera y que con el tiempo al chico se le montaran otras cosas que no eran ciertas en la cabeza
Lucas: Ya he dicho que me quedo, no voy a cambiar de escuela – si su hermana era feliz él no iba a deshacer su felicidad, pero Mar decidió ir unpoquito mas lejos en su postuira y lo cogió del brazo
Mar: Tú decidiste – respondió y le regazo un puñado de nalgadas – PLAFF PLAF PLAF PLAF
Lucas: ¿Qué haces?... ¡Capullo!
Mar: PLAF PLAF PLAF PLAF – Mar no decía nada solo tiraba del brazo para sacarlo de la sala e ir a la dirección del colegio, tenían que hablar con la directora del establecimiento para confirmar que se llevaban al muchacho a casa y retiraban su colegiatura, solicitando su documentación para inscribirlo a otro colegio, al que iban Chus y Toño
Lucas: Para… para, ya camino, ya camino y suelta por favor, que me va a ver todo el mundo – aquellas nalgadas convencieron a Lucas, y aunque ya no iba a quedarse en aquel horrible lugar, tampoco quería pasar la vergüenza de su vida y Mar lo soltó pero no sin antes darle una advertencia
Mar: Pues adando entonces, hablaremos con la directora que ya sabe que vinimos por ti, te despedirás de ella y de tus maestros y si deseas de tus compañeros, luego ya podremos recoger tus cosas, no es necesario llevar todo ahora, solo algo de ropa y tus cuadernos, ¿te parece? – le pregunto y Lucas se quedo callado – plaf plaf plaf ¿te parece? – volvió a formar la pregunta después de repartir aquellas tres nalgadas sin fuerza
Lucas: Ezta bien – responde aguantando las ganas de llorar, un llanto que nada tenía que ver con el dolor y Mar lo jalo de nuevo para darle un abrazo
Mar: azin me gusta, en un rato más nos vamos a caza, donde ziempre debiste estar – agrega
Después de aquello y de lo que menciono Mar respecto a la entrevista con la directora y los maestros y una breve despedida de sus compañeros, con la ayuda de María hicieron las maletas y todos se vieron dentro de la movilidad rumbo al departamento que compartían Mar y María, pero antes irían a comer algo ya que el internado era en otra ciudad y ya era casi la hora de comer, pero algo marco el viaje de regreso, Lucas dio rienda suelta a sus lágrimas, todas las emociones lo sacudieron a medida que se iban alejando de aquel horrible internado y no pudo evitar llorar bajito mirando la ventaba, Toño que estaba sentando a su lado sintió pena, nadie más que él sabía muy bien lo que era echar de menos a una mamá y el pobre de Lucas no tenía mamá ni papá y encima María lo había metido allí dejándolo completamente solo, algo que no entendí y no le gustaba, pero no podía expresar lo sentía, asi que se arrimo a Lucas y lo abrazo, el abrazo fue correspondido de inmediato tocando el corazón de Mar que estaba mirando por el espejo retrovisor, algo que no podía quedar así no mas, así que le dio un toquecito a María en la pierna para que mirara, al parecer Toño había aceptado a Lucas y pensando en eso, pronto pararon frente a un restaurante para comer antes de llegar por fin a casa.
Mar: Lucas no has probado nada – comento Mar mirando el plato de Lucas que apenas probó bocado
Lucas: No tengo hambre – respondió, tenía el estómago cerrado ahora mismo del estrés, pero además el último mes apenas probaba bocado por lo cual se hartaba fácilmente con pocas cantidades, en realidad cantidades alarmantes
Mar: Pues tienes que hacerlo – indico cortando las patatas en pequeños trozos pensando en el comentario de la directora que les dijo que apenas probaba bocado y que esa mañana dejo el desayuno intacto
Toño: Déjalo papá no lo fastidies mas – a Toño le dio pena y salió en su defensa, solo que no uso las palabras correctas, Mar lejos de enojarse se sintió complacido, eso confirmaba que se llevarían bien, y como María escondió su risa
Mar: Yo no lo estoy fastidiando Toño, él tiene que comer – contesto y antes de que su hijo diga algo más agrego – ayer te dije que quería tu mejor comportamiento – y Toño bajo la mirada a su plato
Toño: Yo no me porte mal es que ya le has regañado mucho hoy – reprocho a su manera lo que su padre había hecho en el internado
Mar: Toño hijo pero tiene que comer, después el desayuno no comió nada – María como se sentía culpable quiso intervenir
María: Bueno está bien, mejor vamos a pedir un trozo de tarta de chocolate – y lo primero que hizo Toño fue mirar a su padre, María puso los ojos en blanco… Mar ya exagera con el tema del chocolate
Toño: Paaa ¿puedo? – Mar se quedó mirando a Toño
Mar: Nosotros hicimos un pacto con el chocolate Toño – le recordo, es que Toño se comió todo lo que le compró Cris día antes y el pacto era o comía chocolate cada tres días o no comía chocolate un mes
Toño: Pero paaapiii ellos van a comer – gimió haciendo un puchero
Mar: Sin peros Toño, no hay chocolate pide otro postre – sugirió y Toño sabía que perdió la batalla y cuando vino el camarero a ver que querían de postre Lucas pidió un helado de fresa por consideración a Toño, si el no podía comer chocolate no se iba a comer delante de él; María y Mar se dieron cuenta de aquel frente y Mar no sabía si estar contento o no de como se aliaban esos dos, algo le decía que sería mal asunto
Toño: Papá puedo perdí el helado de fresa – y se quedó callado a ver que decía su papá, Mar hizo como si se lo pensara
Mar: Zi Toño puedes
Y a Toño se le iluminaron los ojos y todos pidieron el mismo helado, cuando llegaron a la casa le presentaron a Antonio y Chus, pasaron la tarde en relativa calma con Lucas más callado de lo habitual, en realidad un poco tímido después de todo sólo conocía a Mar y ahora estaba algo avergonzado de lo que pasó en la mañana, preguntándose si así iba a tratarlo más de ahora en adelante sobre todo si vivía en su casa.
Mar: María tienes que llevar al doctor a Lucas ¿por qué no cojes cita ahora? – sugirió en uno de esos momentos que les permitió la privacidad
María: Mejor otro día, que cuando le diga eso se va a poner hecho una fiera – ahora quería complacerlo en todo ya que la había perdonado
Mar: María no la cagues de nuevo, si te llamaron fue por ver a Lucas realmente mal y si a estado todo este mes sin comer bien no está muy bien de salud y si se pone como una fiera ponte firme – le reprocho
María: Pero Mar yo no quiero que me odie
Mar: Ahora no tiene a tus padres te tiene zolo a ti y aunque quieras no puedes complacerlo en todo – le reflexiono, entendía lo que sentía – o es que crees que a mí me gusta negarle las cozas a Toño – le pregunto mas para que lo piense que por otra cosa
María: No se que tú quieres complacer a Toño pero yo – y Mar la interrumpió
Mar: Pero nada, llama al doctor y concreta una cita para mañana yo te acompaño
María: Esta bien voy a llamar – se le iba hacer difícil pero Mar tenía razón
Cuando llegó la noche Mar le dio un pijama a Lucas para que se bañara y cambiara ya que en apuro y la emoción de irse con su hermana se dejo la ropa de dormir en el internado y cuando sus otros dos niños estuvieron en la cama María y él fueron hablar con Lucas, habían concertado la cita con el medico
María: Hola cielo – que bien se sentía teniendo a su hermanito cerca de ella era como si por fin llegó su paz interior
Lucas: Hola ¿qué pasa? ya me iba a dormir – agrego apurado, tenía la luz encendida y creía que venían por tener la luz prendida, después de todo en el internado tenían una cierta hora para apagar la luz y irse a la cama
María: Luki cielo mañana en la mañana tenemos cita en el médico – María hizo una pausa haber que decía su hermano
Lucas: Zi queréis yo puedo quedarme con Toño – contesto entendiendo que la cita era para ellos y como María se quedó callada intervino Mar
Mar: Lucas no has entendido, él que tiene cita con el médico eres tu – y la cara de Lucas se transformó
Lucas: ¿por qué? – ya estaba bien de todo eso, ¿qué les pasa a todos?
María: Luki, la directora me dijo que no te encuentras bien mejor visitamos un médico, azín zalimos de dudas
Lucas: ¡Y una mierda! … no voy a ir porque tú ahora quieras – la acuso levantandose como un rayo – yo estoy bien, ZE cuidarme zolo – él no hiria al médico a que lo acribillaran con las agujas
Mar: Lucas zolo te lo estamos comunicando, mañana iráz por las buenas o por laz malaz y no creo que quieraz zaber como zon por las malas – anuncio con el rostro inexpresivo, y Lucas se quedó callado, algo en el tono de su voz hizo que se sienta amenazado, el no podía luchar con Mar, asi que lo tomo como era, una orden que era mejor cumplir – buenaz nochez Lucas – dijo al final Mar, abrazándolo y dándole un beso en la cabeza – cuidaremoz de ti – murmuro en su oído, solo para él
María: Buenas noches tesoro, no te enfades lo hacemos por tu bien – María se sumo a la despedida y como Mar lo abrazo y le dio un beso en la frente
Lucas: Buenas noches – respondió y se tapo hasta la cabeza, no queria que lo vean, se sentía avergonzado, violentado, enojado y con ganas de llorar, como que no le gustaba esta nueva situacion
Mar simplemente sonrió pero María se sentía una bruja, después fueron a la habitación de Chus y por último a su dolor de cabeza: Toño pero cuando entraron no lo encontraron y a Mar casi le da un infarto
Mar:: ¿Donde coño está este niño ? ¿a cazo no voy a tener descanso? – la furia le subió a la cabeza, ¿de verdad Toño con la advertecia que le hizo no le iba hacer caso?
María: Tranquilo Mar no ha podido ir a ningún lado, tiene que estar en un lugar de aquí arriba ¿cómo va a bajar con la silla? – y Mar respiro profundamente, tenía razón, Toño tenía que estar arriba solo podia estar en un lugar…con el abuelo
Y no se equivocó es que Antonio desde que le dio el tirón de orejas ya no habían hablado más, así que su abuelo aprovecho para hablar con su nieto, Toño se disculpó con su abuelo y le dijo que lo hizo porque Chus no lo dejaba en paz, cosa que el abuelo ya sabía pero eran cosas de chicos y no le dio más importancia, pero Toño se acomodó en la cama del abuelo que puso una película para verla juntos, pero Toño ya dormitaba a su lado cuando Mar llamo a la puerta de su padre, cosa que despertó a Toño.
Mar: Toño porque no estás en tu cuarto – Toño dormía más con el abuelo o con ellos más que en su propia cama
Toño: Porque vine hablar con el abuelo vimos una película y ya está la cama muy calentita – como diciendo de aquí no me echa nadie
Mar: Bueno, hora de ir a la cama, dejar dormir tranquilo al abuelo – pero el abuelo zanjó el tema si su nieto quería dormir con el no había de que hablar
Antonio: Mi cama es grande y hay zitio para los dos – y Mar sabía que no podia negarle nada a su padre
Mar: En ese caso entonces, buenas noches terremoto – le dijo Mar dándole un beso en la frente – buenas noches papa
Antonio: Buenas noches hijo
Y Mar se fue directo a su habitación, deseando descansar pensando que al día siguiente le esperaba un día largo que patalear y presentía que Lucas iba a dar más batalla que Toño en sus mejores épocas.
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