Pequeñas travesuras, Capítulo 20

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 Pequeñas travesuras

 Autora: Anaisbvm

 Capítulo 20 , En problema. 

 

 

Marco

Al principio solo probé un poco pero no era nada grave así que fui por alcohol, no llevaba tomando demasiado pero si no estaba casi consciente de nada de lo que hacía.

Mi primo bailaba arriba de las mesas con muchas personas más mientras yo me besaba con una chica de estatura mediana, pelo negro y ojos verdes. Era preciosa, si tenía un poco de mal humor pero a esta hora no me importa nada.

Yo estaba muy concentrado en lo hacía hasta que fui por otro trago y un chico se atravesó golpeando mi hombro, no alcancé a sostener el vaso y este se hizo mil pedazos en el piso.

- Fíjate.- le dije seco.

- Tu estabas pasando idiota. No busco problemas así que quítate de mi camino.- me quedó mirando y yo como un estúpido seguí con la discusión.

- No seas así, tu me vas a sacar otro trago, no tengo tiempo.

- ¿Quien te crees que eres?

- No un imbécil como tú.

- Cállate y déjame pasar.

- No. 

- Dices una tontería más y te rompo tu linda cara, así que déjame pasar donde mi novia.

- ¿Quien? ¿Esa de pelo negro? - este asintió.- La acabo de besar y no sabes como se me p..

No se cuando ni como pero un golpe en seco de él me dejó tirado en el piso, traté de levantarme pero otra vez me dio un puñetazo y comencé a escupir sangre.

Enojado y casi inconsciente le quise pegar dándole ahora yo un puñetazo directo en la nariz pero no alcancé.

- ¡Marco! ¡Detente! - escuchaba lejos a Daniel pero este no se quedó mirando si no se metió en la pelea también recibiendo golpes.

- Basta, paren esto.- unos chicos nos separaron porque rodamos en el suelo y mi amiga me miró enojada.

- ¿A esto viniste tú? - le habló al chico.- no quiero verte de nuevo en una fiesta que no fuiste invitado. 

- Venia por mi novia.- respondió él.

- Por tu ex querrás decir porque mi amiga no está para tus jueguitos. Fuera de aquí.

Ahora que me vengo a dar cuenta me besé con la ex de aquel sujeto. Que pequeño es el mundo.

Mi primo me ayudó a levantarme, me guió hasta el baño para limpiar la sangre que tenía en el rostro y mi amiga igual.

- Lo siento Marco, el no tenía porque venir..

- No te preocupes.- le sonreí apenas.- Yo seguí.

- De todas maneras lo siento, es un chico problemático. Para mi que te va a quedar un feo moretón en el ojo.- cerré un poco los ojos y me miré al espejo dándome cuenta que tenía toda la razón.

- Se te ve muy mal eso.- Daniel a pesar de tener muchos tragos encima seguía un poco consiente.- Tenemos que ir a la casa, es lo mejor.

- Papá.. m-me va..- no terminé la oración y corrí a la taza del baño a vomitar todo lo tenía.

- Pásame tu teléfono para llamarlo. Ay que asco.- me miró al limpiarme en su poleron.

- Lo siento.- un dolor de cabeza me invadió.

- Si, si. Tranquilo.

- No, papá me va a matar.- estoy borracho pero no pendejo.

- Marco mírate, no estamos en condiciones para quedarnos y además te encuentras pésimo.

- Suena tú celular.- le dije y este me miró confundido revisando la llamada.

- ¡No me jodan!

- ¿Quién es? - lo miraba tan pálido casi por darme una vomitada encima.

- Es mi papá.. ya silencio.- me empecé a reír sin razón.- ¡Shhh!

- Ya.- tape mi boca con una mano concentrado en mis arcadas pero de la nada miré mi mano cuestionandome sobre porque tenía cinco dedos y no seis.

- ¡Papá! Eh, si pero no. Escúchame, no fue con intención.- se quedó en silencio escuchando atentamente el celular.- ¿Que si estoy tomado ahora? Se nota la confianza. No puedo pasarte a mi tío es que estoy en el baño, ahg.. se corta la señal adiós.

- ¿Como te fue..- le sonreí antes de caer desmayado al piso.

- ¡Marco! - fue lo último que escuché.

Daniel 

Cuando mi querido primo se desplomó en el piso frente a mi con la poca conciencia que me quedaba marqué el número de mi tío aguantandome los regaños que me iba a dar.

- ¿Tío?

- ¡Daniel! Son las 2:30 de la mañana y aún no llegan ¿qué les dije de la hora?

- Tío.. 

- No, esto es mucho. Los quiero ahora en la casa, pásame a Marco.

- Creo que eso no se va a poder.

- ¿Como?

- Se desmayó, una larga historia y creo que estoy apunto yo también.- me sentía realmente mal.

- ¿Donde es el lugar? - pensé que iba a decir muchas más cosas enojado como lo hace papá pero me sorprendió su actuar. Le mandé la dirección por mensaje.- No se muevan de ahí.

- No pensaba hacerlo.- me cortó y la amiga de él solo miraba la situación tratando de darle aire a Marco.

- No despierta.

- Creo que seré el siguiente.

En un momento solo me quedaba dormido, sentí solo que mi tío Connor llevaba como podía a su hijo mientras que yo iba a su lado cerrando los ojos por el cansancio.

No escuché nada de lo que dijo y me quedé dormido de repente en el auto.

Connor

No tenía noticias de Liam, lo llamé muchísimas veces y él no contestaba. Nunca pidió permiso para quedarse en la casa de su amigo, por cierto su familia tampoco contestaba.

Me encontraba en el sillón super angustiado por no tener noticias de él y para más era muy tarde, las 2:30 de la madrugada no ayudaban para nada.

Quería pensar lo mejor entonces dije que estaba sano y salvo con su mejor amigo en la casa, se quedaron dormidos por el cansancio seguramente entonces no me pudieron llamar. Realmente esperaba eso.

Todos los demás dormían tranquilamente y yo era el único despierto esperando también a Marco junto a su primo. Ellos se pasaron en más de una hora para llegar, ninguno contestaba el bendito celular que no se para que tienen si no responden.

Decir que estaba enojado era poco, las salidas iban a estar prohibidas para esos dos desde ahora en adelante hasta que aprendieran a respetar horarios y avisarme.

Cuando recibí por fin esa llamada que tanto esperaba de Daniel o Marco eran malas noticias, uno de ellos desmayado y el otro por desmayarse. Corrí al auto sin pensarlo para ir a buscarlos. La dirección de la fiesta me pareció un poco lejos pero solo quería encontrarlos, al llegar esa casa era inmensa con mucha gente en el patio, cervezas tiradas en el pasto, gente comiendo brownies que dudo que estén libres de drogas.

Me concentré en encontrarlos, estaban ambos en el baño, al verlos los fui a revisar inmediatamente para comprobar que se encontraban bien.

- ¿Que comieron? Hey, mírame Daniel.- solo entrecerraba los ojos tratando de comprender lo que le decía.

- Señor Connor, no estuve con ellos la mayor parte del tiempo pero se que tomaron bastante, quizá probaron el pastel de la cocina..

- ¿Que? ¿Pastel? ¿Tenía algo eso?

- Pues si, usted sabe que se hacen con una droga en específico.

- Shhh, el no tiene que saber.- Daniel se puso a reír mientras mi enojo aumentaba al igual que mi preocupación.

- ¡Les dije caramba! Vengan, vamos al auto. Levántate de ahí Daniel.- ayudé a Marco que estaba tirado en el piso.

Podría decirse que respiré para calmarme durante todo el camino, no iba a hablar con ellos en estas condiciones solo esperaba que no hubieran consumido demasiado porque no saben el daño que les hace a la salud algo como eso.

En la casa los llevé a sus habitaciones y en el caso de mi sobrino a la de invitados. Me quedé pensando un rato en la cocina sobre mi otro hijo, estaba tan preocupado que dudaba poder dormir durante la noche.