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viernes, 28 de mayo de 2021

Una perfecta familia, Capítulo 10.


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 Una perfecta familia. 

 Autora: Terry

 Capítulo 10. 

 

Toño iba en el asiento del copiloto estaba lleno de rabia, su papá tuvo la osadía de pegarle en la calle, si… tenía rabia pero también se había retrasado casi dos horas pero estaban justificas; bueeeeno si, pero su papá no lo sabía, además se enfadaría más si lo contaba, esta vez ya no podía escudarse nuevamente y esta vez su papá si que estaba enfadado, esos y mil pensamientos más confundían peor a Toño, llegando siempre a la misma conclusión, que él se lo busco… si no hubiera dejado que mamá me viera esto no habría pasado, se decía mentalmente… cuando llegue le voy a contar al abuelo todo lo que me hizo, se consolaba pensando en que su abuelo menos mal estaba en casa.
Por otra parte en el asiento del conductor Mar se repetía una y otra vez: cuando llegue a casa esto se termina me lo cuenta o lo dejo sin poder sentarse en una semana y luego contrato un detective privado y me hago con la verdad, es que el pobre ya no sabia que mas pensar, había tratado una y otra vez de que su hijo le cuente, pero no había nada mas que evasivas y medias escusas, y así cada uno sumido en sus pensamientos llegaron a la casa; Mar abrió la verja con el mando a distancia y llegaron a la puerta, Toño ya se había quitado el cinturón de seguridad y estaba ya con la mano en el picaporte para zafar de allá, pero su padre lo detuvo en el último minuto.

  • Mar: Cuando entres a la caza te quiero derechito a tu habitación que de ti depende de cómo termine la charla, zi hablando o mi mano en tu culito – lo amenazo y Toño le echo una mirada de fuego no le gustó para nada la amenaza cosa que su papá no le dejo pasar – no me mires azi Toño que esto te lo busca tu solito – Mar bajo de coche cosa que Toño no hizo se quedó se moverse de su asiento y Mar, ya frustrado del todo desvió sus pasos a la puerta de copiloto abriéndola con brusquedad  y sacando a Toño del brazo – vamos a ver zi vas hacer cazo – y con esa que no fue una amenaza lo giro un poco y le planto tres palmetadas bien fuertes – PLAF PLAF PLAF – mientras  Toño trataba de esquivarlos pero no pudo y esos tres llegaron al medio de su culito flaco – vas a pazar o  seguimos aquí – pregunto enojado
  • Toño: ya pazo…. ya pazo – y ya no pudo más y el nubarrón de lágrimas que estuvo contenido se disparó y cuando se vio suelto de agarre de su padre salio disparado a la entrada de la casa y cuando estuvo dentro corrió a los abrazos de abuelo con el corazón en la boca, su mundo estaba de cabeza
  • Antonio: ¡calma hijo, calma! – le dijo respondiendo a su abrazo, y Toño lloro peor – ¿qué pazo?... no llores azin y tu papá – pregunto, pero Toño no tuvo que responder porque Mar entró a la casa y cuando vio a su niño en los brazos de su padre llorando como si la vida se le fuera en ello y lo que le estaba contando y acusándolo no pudo más que embozar una triste sonrisa
  • Toño: abuelo me pego…. Buaa me pego en la calle frente a todo el mundo
  • Antonio: Ya vaquero ya no llores – y Mar se dijo a si mismo que si seguía escuchando a su niño llorar no iba a lograr lo que se propuso y el ese día tenía que saber lo que le pasaba
  • Mar: Te dije que zubas a tu cuarto – y Toño lo miro como si a su papá le hubiera salido siete cabezas de serpiente
  • Antonio: hijo porque no te calmas? – pidió el abuelo, porque hasta a él le sonó brusco, es que tampoco saludo al entrar
  • Mar: estoy calmado papá pero tengo que hablar con él –  eso es como si le dijera no te metas que esto no es una chiquillada esto es serio el abuelo comprendió que tenía razón
  • Antonio: vaquero zube y acabáis con esto de una vez, pero esta vez zin mentir – se lo dijo en un abrazo con sus labios pegados a su oído para que nadie más escuchara, Toño se separó un poco para mirar a su abuelo con ojitos de cachorro le estaba pidiendo que fuese a que su papá lo matara, por lo visto no lo iba ayudar – No me mires azi vida mía que le debes muchas explicaciones a tu papá y zalir de este mal entendido que tenéis los dos vaquero, tienes que confiar en tu papá – con eso se le bajaron dos lagrimones por las mejillas de Toño el si confiaba en su papá es que le estaba haciendo caso a su mamá  miro a María que no quiso intervenir y ésta al ver esa miradita tan cargada de tristeza se acercó le planto un beso en la cabeza, por último miro a su papá con una mirada super triste, el tampoco quería hacer todo eso, finalmente se soltó suavecito del abrazo del abuelo y se fue a paso lento a su habitación

Mar mientras veía a su niño alejarse los recuerdos se hicieron dueños de su mente cuando por primera vez tuvo a Toño en sus brazos, lo chico que era lo frágil que fue y seguía siendo; si alguien quería hacerle daño no podía defenderse, ahora tampoco lo veía de diferente forma, si alguien le quisiera hacer algo malo a su hijo no necesitaba mucho esfuerzo,  solo se lo hacía, porque su niño era tan inocente todavía.

  • Antonio: ¿estas bien ratoncito? – pregunto Antonio con el afán de aplacar un poco a su hijo y Mar solo rodo los ojos, su padre aún lo veía como si tuviera tres años
  • Mar: zi papá estoy bien y deja de llamarme azi que ya estoy grandecito – reclamo y María no podía aguantar la risa y la disimulo tapando su boca – bueno voy a zubir para el cuarto de Toño – anuncio como si eso fuera lo peor que se pueda hacer
  • Antonio: no zeas duro Mar haz que te cuente lo que paza
  • Mar: voy a intentar lo que esté en mi mano papá – con eso no prometió nada – yo no Tengo ganas de castigar a Toño y de un tiempo pa ca  que tengo que hacerlo cazi a diario – agrego pensando en eso y Antonio se acercó a su niño dándole un abrazo para reconfortarlo, sabia como se sentía, como el peor padre del mundo

Cuando Mar subió por las escaleras, Antonio no puedo evitar solo ver a ese niño que con temor le confesó que iba a ser papá; es que aquel entonces Mar aún era un niño, y no le quedo más remedio  que confesarle a su papá que dejó embarazada a una chica cuando su papá le había hablado de sexo, cosa que fue muy vergonzosa para Mar, y esa confesión se hizo realmente pesada porque su padre no le prohibió disfrutar del sexo, solo le recomendó un millón de veces que se cuidara no solo por el embarazo sino porque también podía contagiase de alguna enfermedad.

  • Mar: Ven Toño tenemos que hablar – dijo Mar apenas paso a la habitación de Toño y se sentó en la cama, Toño  por su parte, asustado como estaba, solo negaba con la cabeza enérgica mente y no quiso moverse de donde se encontraba, detrás de una silla por si acaso, su padre dio un suspiro y repitió la orden – Toño,  hijo – dijo de forma conciliadora para que no lo acusen de no intentarlo –  tenemos mucho de que hablar azin que ven pa ca – pero Toño volvió a negar con la cabeza estaba convencido de que lo llamaba para zurrarle y Mar, repitió una tercera vez la orden estirando la oportunidad de hacer lo correcto – por favor Toño obedece – pido pero nada, Toño no solo negó la cabeza sino que quiso huir y Mar ya harto de que nunca lo obedezca se levantó apresado a Toño de un brazo y llevándolo donde estaba el y sin mucho esfuerzo lo puso en sus rodillas desabrochado el botón y la cremallera de los pantalones de Toño y de un tirón se los bajo hasta las rodillas, dándose cuenta que Toño estaba muy delgadito pero eso no impidió de que le calentara ese culito flaco – tu lo has querido azin PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF
  • Toño: paaaaapi
  • Mar : PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF
  • Toño: buaaa aauuu auuu yaaa papi YAAAA – rogaba Toño tratando de zafarse, esta empezaba a ser la peor zurra experimentada, papá le había bajado la ropa
  • Mar : quiero que me digas ¡¿que está pasando?! – elevo un poco la voz e hizo una pausa para darle a Toño la oportunidad de hablar
  • Toño: no papi noooo – rogaba agobiado, quería decir que no lo castigará más, pero para Mar se creia que le estaba diciendo que no le diría lo que estaba pasando y reanudo la paliza
  • Mar:  PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF
  • Toño: no papi noooo – y Mar ya ido por la ira cogió una clancla de Toño de estar por casa y lo sonó con eso
  • Mar: PLOF PLOF PLOF
  • Toño: BUIAAAA BUAAA YAAA PAAAAPI YA TE CUEEENTO YA TE CUEEENTO  puso todo sus pulmones en el griterío porque realmente dolió
  • Mar: PLOF PLOF – papá término con dos más y tras soltar la chancla sentó a Toño en sus piernas para consolarlo, cuando la puerta se abrió de un solo golpe dejando a Mar de piedra porqué Toño estaba tan asumido en su desgracia que no se dio cuenta que María entro hecha una fiera
  • María: pedazo de Animal como ze te ocurre – quería quitarle a Toño de sus bazos pero Mar no se lo permitió, en eso llegó el abuelo que no pudo detenerla para que no subiera
  • Toño: papáaaaa – lloro Toño muerto de vergüenza – ZACALA DE AQUIIIIII – grito al darse cuenta que María había entrado y lo vio así y lloro más fuerte se agarró al cuello de su papá en un abrazo - NO TENGO ROOOOPA AA AGGSSS BUAAA
  • Mar: SHUUU SHUUU hijo, no pasa ná – Mar pego un tirón a la sábana de la cama y cubrió a Toño de cintura para abajo, la verdad es que el pantalón voló con tanto pataleo y el calzoncillo colgaba de su pie derecho
  • María: ERES UN ZALVAAAJE – grito enfadada – ¿Cómo SE TE OCURRE PEGARSE DE ESA MANERA?  estaba tan enfadada, tan enojada que María se fue con todo hacia Mar con la intención de tirarle de los pelos, menos mal la cogió el  abuelo diciéndole que mejor salgan
  • Antonio: María mejor zalimos ellos tienen que hablar – pidió abrazándola por detrás
  • María: pero no has visto lo que ese zalvaje le hizo? – le pregunto con los ojos cuadrados de la reacción pacifica del abuelo, eso la desconcertó
  • Antonio: nada que no tuvieran que hacer – replico y la agarró pasado un brazo por su cuello y la saco de la habitación – calma María que Mar no lo ha laztimado, nunca lo haría
  • María: ¿cómo que no?, ¿no has visto como lloraba? – dijo con los ojos húmedos
  • Antonio: nada que no se pase en media hora, mujer

Mientras tanto en la habitación, Toño lloraba a mares, más que por la paliza por la horrible vergüenza que tenía, se sentía vulnerable, expuesto y abusado.

  • Mar: venga hijo – decía Mar tratando de calmarlo –  ya pazó cálmate no llores azi – murmuro queriendo abrazado
  • Toño: me viooo…me viooo zi ropa buuuaa – volvió a llorar esquivando a su padre, él tenia culpa de esto
  • Mar: no te vio nada yo te tape – declaro procurando que eso baste, que lo último que quería es que su hijo le tenga enojo por este mal trago, porque una cosa era que él lo vea sin ropa y otra distinta el resto de la gente de la casa
  • Toño: maloooo…malooo – era lo único que podía decir en su defensa, estaba tan enojado que no podía reclamar nada
  • Mar: ya cariño no llores azi bebé – volvió a decir pero esta vez alzándolo y volviéndolo a poner en sus rodillas – sabes que luego te duele la cabeza
  • Toño: me pegaste muy fuerte cof cof – por fin se quejo de la paliza
  • Mar: ya mi vida – dijo Mar apretándolo en su pecho – zabes que papá te quiere y zi te castigue no fue por na – le dijo y en parte tenía razón – además me has dicho que me vas a contar que es lo que sucede – agrego y Mar empezó a mecer a Toño que se fue calmando – pues estoy esperando
  • Toño: yo… verás papá buuuaaa – gemía 
  • Mar: Toño bebé cálmate si – le pido por enésima vez – venga zea lo que zea papa no ze va a enfadar más – prometió – venga Toño tengo que zaber que sucede, estoy muy preocupado mi vida
  • Toño: hace unas zemanas mamá vino a la zalida de colegio – soltó y sintió que se desinflaba y Mar paro las orejas
  • Mar: ¿tu mamá?
  • Toño: zi… me dijo que quería hablar conmigo y fuimos a hablar dentro de zu choche – empezó a contarle – ¿porque no dejas que pueda verme – pregunto disparando el primer reproche equivocado
  • Mar: ¿Qué? … ¿de dónde zacas ezo hijo?
  • Toño: ella me lo dijo – confeso y sus ojos se llenaron de lágrimas, el tema de su madre era algo que lo hacía muy vulnerable
  • Mar: no mi churri guapo – dijo papá sacando su mejor artillería de mimos, además se lo debía – eso nunca, palabra – prometió – yo nunca le prohibí que te viera, ella puede venir a vizitarte cada vez que quiera
  • Toño: y porque no me contasteis qué vais a tener un bebé con María? – pregunto desconfiado – acaso ¿ya no me queréis? – y desvió la mirada muy sentido
  • Mar: pero ¿de qué demonios hablas Toño? –  y a Toño ya se le resbalaban las lágrimas de nuevo – ¡claro que te quiero! – le aseguro cogiendo su mentón – y ¿de donde sacas que vamos a tener un bebé?
  • Toño: cuando María ze puzo mala no quisiste venir con nosotros – lo acuso
  • Mar: Toño claro que quería ir, pero María ze encontraba mal no podía dejar sola – le explico – o ¿cuándo tú te pones malito te dejo solo? – le pregunto y volvió a insistir – y pero porque dices que vamos a tener bebé
  • Toño: eze día cuando el abuelo entró al baño – y Mar recordó el incidente – mamá vino a verme – le dijo y se limpio los ojos, no quería llorar, quería ser valiente pero no podía –  y me pregunto porque no estabais ustedes, le dije que no viniste porque María ze encontraba mal – y empezó a respirar mal, estaba aguantándose de llorar de nuevo – y ella me dijo que ze encuentra mal porque estaba embarazada y que cuando naciera el nuevo bebé ya no queríais estar  a mi lado que me ibais alejar – y cada frase fue acompañada de un sollozo muy sentido y se hizo chiquito, se hundió en sus hombros, estaba tan triste
  • Mar: por ezo te dio el ataque de ansiedad – aseguro Mar
  • Toño: es que yo no quería que me alejarais – dijo en un gemido – yo no quiero que me dejes sin querer – y se largo a llorar abrazando a su padre con desespero
  • Mar: ohhh churri churri, churri – dijo papá acunandolo en su regazo, al parecer sus piernas servían no solo para castigarlo sino también para confortar – ¡cariiiiño! – dijo en un mimo –  yo nunca, nunca, óyeme bien Nunca te voy a dejar de querer, por eres mi hijo –  Mar no dejaba de acariciarle las mejilla y darle besitos ya estaba pillando la situación – y en cuanto a Maria,  mi vida ella no puede tener bebés y tu mamá lo zabe – era necesario aclara aquellos
  • Toño: entonces porque me dijo ezo – pregunto muy confundido, Mar de ser como Pilar, hubiera torcido la historia a su favor, cosa que no hizo
  • Mar: que más te dijo – prefirió preguntar
  • Toño: que no podía decirte que la estaba viendo – confeso jugando con los botones de su padre – que cuando tú te enterarás ya no me dejarías verla y que María ze metió en el medio y por ezo os zeparateis
  • Mar: no mi vida – negó papá – mira te voy a contar lo que pazo – dijo y decidió que quizás era hora de hablar de algunas cosas –  no ze zi lo vas a entender porqué eres muy chico pero no quiero que te confundas mas, verás cuando yo estaba en el Instituto  yo conocí a María y le pedí que fuera mi novia y empezamos a salir… tu mamá era amiga de María y por lo visto yo también le gustaba  y un día en una fiesta bebí más de la cuenta en donde yo no me acordaba de nada y amanecí en la cama de tu mama
  • Toño: te la… te la – se mordía la lengua por decir te la follaste, pero no se atrevió
  • Mar: no zigas Toño, ten respecto que está al lado de tu padre
  • Toño: pero zi no he dicho nada malo
  • Mar: pero estabas a punto, pero bueno ¿quieres que ziga ¿
  • Toño: zi
  • Mar: pues cuando ze pazo un tiempo tu mamá me dijo que estaba embarazada y yo no tuve más remedio que contarle a María y ella ya no quiso verme más – recordó lo horrible que fue perder a María aquel entonces – y también tuve quec contarle al abuelo y ella a zus papás y decidieron que nos cazariamos para que el bebé naciera en una familia, o sea tu – le dijo cogiendo la nariz de Toño entre sus dedos
  • Toño: pero nos la querías papá – concluyo él
  • Mar: pero tu ibas a nacer y con el tiempo aprendí a quererla, además cuando tú naciste fue lo más maravilloso que me pudo pazar en la vida y yo estaba muy feliz
  • Toño: pero tu zi metistes bien la patay nadie te castigo – dijo enfadado
  • Mar: bueno yo no he dicho ezo
  • Toño:¿te castigo el abuelo? – Mar de solo pensarlo se le ponía e vello de punta
  • Mar: zi Toño, zi me castigo
  • Toño: entonces ¿por qué os zeparasteis?
  • Mar: bueno tu mamá cuando tenías cinco años me dijo que nos cazamos muy jóvenes que ella quería vivir la vida y conocer cozas nuevas
  • Toño: y porque vine a vivir contigo
  • Mar: porque tú mamá dijo que ella iba a estar viajando y no podía estar de acá para allá contigo y me dieron la custodia a mi, pero quedamos en que ella podía visitarte cada vez que ella quiera
  • Toño: entonces no os zeparasteis por María
  • Mar: no mi vida, a María la vi en un viaje un año después de separarnos tu mamá y yo – le dijo mientras le arreglaba el pelito con los dedos – me costó mucho que María me perdonará y de lo demás ya te acuerdas porque te la presente y luego todos los fines de semana nos visitaba hasta que ze vino a vivir con nosotros
  • Toño: entonces ¿por qué me engañó mamá? – pregunto en hilito de voz, Toño estaba triste por a ver mentido a su papá – papá lo ziento yo la creí además quería verla
  • Mar: lo ze cariño – sonrió Mar – pero tú no te preocupes por eso, yo voy hablar con ella mañana y decirle que venga a recogerte a caza cuando quiera verte, que no os tenéis que esconder – prometió, pero no le comento lo que tenía pensado decirle en privado, a todo eso a Toño le sonaron las tripas – huy …. parece zer que alguien tiene hambre
  • Toño: zi papi tengo mucha – la verdad que entre unas cosas y otras eran la seis de la tarde
  • Mar: pues bajemos a comer, que nos preparen algo rico
Mar y Toño bajaron a comer contentos, al fin las cosas se solucionaron entre ambos, pero al entra a la cocina no se esperaban lo que se le venía encima…


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