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la familia
Autor: Adán
Capítulo9
Ya había pasado 1 semana normal dentro de lo posible, Adán aun no hablaba con su padre aunque a medida que pasaba el tiempo las cosas empeoraban, pensaba mientras revisaba los movimientos de la fábrica del mes anterior. Eran cerca de las 11 de la mañana y Adán estaba en su oficina trabajando.
Disculpe señor una señora lo busca – era Estela su secretaria quien lo interrumpió, sacándolo de sus pensamientos
Dígale que pase – contesto Adán mirando la hora y Estela hizo pasar a Maggie
Hola Adán – saludó Maggie
Hola siéntate – ofreció Adán tras saludarla con un beso en la mejilla
No te preocupes es algo corto… ¿Ya hablaste con tu padre? – pregunto Maggie toda seria
Aun no… – Adán hizo una mueca no le gustaba que a cada rato le hicieran esa pregunta
¿Cuándo lo harás?
¡No lo sé, cuando se me dé la gana! – Adán levantó la voz un poco, no pudo evitarlo
Pero debes hacerlo lo antes posible, con mi madre iremos hasta su casa a ver si a tu madre le gustaría oír eso – Maggie sonó amenazante lo que me molestó peor a Adán
No te metas con mi madre, ella es tan víctima de ese señor como tu madre – respondió Adán frunciendo el ceño
Yo solo te advierto – al parecer aquello iba a ser su última palabra y se dirigió a la puerta dejando a Adán con un sabor amargo
Adán en un arranque de rabia tiró todo lo de su escritorio, enterrando luego la cara en las manos.
Después de eso el día transcurrió normal dentro de lo posible, Adán tras el encuentro con Maggi termino su jornada un poco antes por que no estaba de ánimos ni concentrado en sus tareas, por lo que decidió volver a casa antes de equivocarse con el papeleo, al llegar a su casa vio a Mónica jugando con Brisa.
Hola, amor – Mónica cargó a Brisa antes de besar a Adán – Has llegado mucho antes
Hola amor… hubo un problema en el centro y tuvimos que parar la jornada – y no era mentira, hubo una marcha de protesta con tinte político
Ahh… Si estaba oyendo las noticias – le respondió atenta pero a su pequeña hija – te cuento, Brisa ya dijo su primera palabra y le salió otro diente – agrego orgullosa levantándole el labio a Brisa para mostrar los dientes a su padre
Pa… pa – Brisa levanto las manitos en buscad de ayuda arrancando una sonrisa a su padre
¿Y cómo te fue amor? – preguntó Mónica dejando bajar a Brisa
No muy bien… esa señora vino amenazante a preguntarme si ya hablé con mi padre – aquello tampoco fue del gusto de Mónica
¿Y si esa señora está mintiendo? – le pregunta sembrando la duda en su marido – Lo he pensado amor ¿por qué aparecerse ahora? ¿por qué su madre nunca busco a tú padre y se aparecen ahora?
No creo que mientan… Hasta me mostro una foto con mi padre…
Entonces no queda más esperar que esto se aclare pronto por el bien de toda la familia – Mónica le dio un abrazo a su marido confortándolo antes de sacar su cartera, tiene que ir de compras
Yo también lo espero – suspira Adán tomando en brazos a su niña
Ya vuelvo, voy a hacer la compra – se despide Mónica despistando a Brisa
Un par de horas más tarde, cuando todos terminan de cenar Adán y Mónica son arrebatados por una desagradable llamada.
¿Hola? – Contesta Adán al teléfono
¡Hermano tienes que venir rápido! – era Cat, se oía desesperada teniendo de fondo un gran alboroto
¿Qué pasa? ¿Todo está bien? – Adán suena preocupado esperando que no sea lo que supone
No lo sé… Acabo de llegar y ya estaba ¿Qué pasa? ¿Todo está bien?ese alboroto, vente por favor que están por llamar a la policía – le ruega su hermana sin entrar en detalles
¡No llamen ya voy para allá! – Adán corta rápido y Mónica se acerca
¿Qué ha pasado amor?
Creo que esto se salió de control… debo ir con mi madre – por lo visto la bomba estallo piensa Mónica angustiada
Yo te acompaño cariño – Mónica empieza a buscar sus llames y es cuando Adán la toma de la mano
Te lo agradezco, se que siempre estás para mi y cuento contigo… Pero la mejor forma en la que me puedes ayudar es cuidar a los niños… Me quedaría más tranquilo sabiendo que están contigo a que están solos – fue una sutil manera de negarse a que lo acompañe, pensando en que seguro a su madre no le haría gracia ver tanta gente alrededor
Diciendo eso se despiden ambos y Adánse apura en acudir al llamado de su hermano, pero cuando llega ve a Cat saliendo con un bolso.
¿Qué ha pasado? – y un beso en la mejilla fue su saludo
Ya se fueron… Amenazamos con llamar a la policía y se fueron… Unas señoras vinieron y una solo dijo tú nombre por eso te llame – Cat lo miro muy seria
Ya habrá tiempo para explicaciones… ¿Y mamá?
En la sala llorando… Y ya puedo hacerme una idea de que es culpa de papá… Iré a dormir a tú casa está noche
Le informó volviendo a coger su bolso, dejando a Adán solo al frente de todo este turbio asunto. Adan solo mueve la cabeza, le queda claro que toca lidiar por su cuenta.
Mamá… ¿Qué ha pasado? – Adán se sienta junto a su madre
No tengo idea hijo… Fue todo muy confuso, solo vi a unas señoras discutiendo con tu padre y se armó un gran escándalo… solo sé que una menciono tú nombre y me pasaron la dirección de una casa, supongo para asomarme – Pamela le pasa la dirección a Adán, era igual a la que le había pasado Maggie y aunque ya lo suponía con esto confirmaba – Tú padre no quiso decirme nada y para no variar de nuevo peleo con tú hermana… Hijo por favor explícame que pasa…
Mamá… No quería que te enteraras y menos así… porque no estaba en mi contártelo – le responde besando sus manos – pero hace una semana una mujer fue a la fábrica y me conto cosas de papá… Al parecer él tenía una doble vida mientras estaba contigo los primeros años… Aquí hay una foto de eso… – y Adán le muestra la foto a su madre la foto que le entrego Maggie
Vaya… Veo que esta foto fue cuando tu hermana Dulce tenia pocos meses de nacida… – responde Pamela desanimada leyendo el reverso de la foto que tenía un año escrito: 1941 – Eso significa que mi matrimonio fue una farsa… que quizás conoció a esa señora poco después de casarnos…
Lo siento mamá… Cuando me entere de esto a mi vinieron a la mente recuerdos que creía bien enterrados en el olvido… – Adán no sabe que más decir
Pamela sabe de qué está hablando su hijo, así que solo suspira y va a la cocina por un vaso de agua, en eso se aparece Arturo que estaba en el patio fumando.
Hasta que te dignas a aparecer… – le dice Pamela a su marido
Yo sé que me equivoque mucho en el pasado pero te juro que no tuve una doble vida – responde Arturo queriendo defenderse
Si quieres hablar para arreglar las cosas ¿Por qué no partes por dejar de mentirme en la cara? Adán me acaba de mostrar una foto tuya y encima de poco después que nació Dulce – se nota que Pamela esta con ganas de pelear
No puedo creer que con solo una foto y un par de viejas locas que vinieron a montar un escándalo ya afirmes que tuve una doble vida… – como siempre Arturo se hace el enojado
¿¡Y que quieres que piense!? ¡Tú fuiste un mal esposo y un mal padre para los niños… borracho fumador y si querías te desaparecías por semanas quien sabe dónde! Pero ahora sé porque te desaparecías y cuando casi me mataste ¡Arrancaste como un cobarde por meses! – y a Adán no le queda más que oír la pelea de sus padres, básicamente como en su niñez
Y luego volví arrepentido y empezamos de nuevo
Más de medio año te tomo para aparecerte de nuevo y dar la cara…
Pero volvimos
Las cosas tarde o temprano van cayendo por su peso Arturo…
Y Adán prefirió cerrar la puerta y evitar seguir oyendo aquella palea tanto por su paz mental, como para no sentirse como un intruso en un asunto tan intimo que debería solo concernir a sus padres y prefirió llamar a su mujer.
¿Y Cat sabe algo? – preguntó Adán por teléfono
No mucho y tampoco le dije nada, no es algo que deba enterarse por mi – y Adán supo a que se refería Monica
Ufff, tengo que hablar con ella… – Responde Adán
Si bueno… Ahora se apodero de la cama… Le dije que podía dormir ahí está noche – Mónica sutilmente cambio de tema
Esta bien yo me quedare aquí con mi madre por si acaso… – responde adán
Nos vemos mañana – se despidió Mónica – trata de no renegar
Lo intentare…
Y antes de que pueda cortar la llamada su madre interrumpió y fue Mónica que prefirió colgar el móvil y escribir a su marido.
Mañana iré a esa dirección… – se oyó a Pamela
Pero mamá ¿Estás segura? o sea igual es demasiado pronto
¿Demasiado pronto para qué? Debo saber esa historia oculta de tú padre y mientras más pronto mejor – Pamela levanta la vista como diciendo a ver impídemelo
Está bien mamá te apoyo… Me quedare a dormir aquí esta noche y no te preocupes por Cat, esta en mi casa – Adán abrazo a su madre confortándola
Está bien hijo…
Ya cerca de las 11 y media de la noche Adán estaba en su antiguo cuarto mirando por la ventana preparándose para dormir cuando de nuevo es interrumpida por su madre.
Dormiré contigo hijo… No quiero dormir con tú padre – le dice con los ojos aguados tratando de no llorar
¿Y me contaras un cuento como cuando era niño?
A Pamela se le dibujo una sonrisa pese a sus llorosos ojos, no es que fuera a contarle ningún cuento a su hijo pero Adán ciertamente con aquel comentario alivio su corazón.
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