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Ramón despertó
a sus hijos para un día de colegio mientras que Rebeca hacia el desayuno,
Moisés y Noel bajaron enseguida pero Abraham no bajaba aun cuando papá ya lo
había llamado varias veces y como no bajaba se dispuso a subir para ver qué le
pasaba a su Pulgarcito.
- ¿Por qué no baja a desayunar? – le
dijo Ramón sentándose a su lado en la cama
- No quiero que se burlen de mí – respondió
y Ramón levantó las cejas
- Abraham ya te he dicho que no se van a reír de ti, así que
baja desayunar que se hace tarde…
Ramón le dio un beso en la cabeza y bajo a la cocina para
halar con sus otros dos hijos y hacer de nuevo la advertencia del día anterior,
mientras Abraham resignado se dispuso a bajar pues no podía estar escondido por
siempre.
- No quiero bromas, ni comentarios ni burlas de lo que
pasó ayer con su hermano – les dijo serio para evitar
problemas
- Ni que fuera de cristal el principito – respondió
Noel algo molesto
- Lo digo en serio como le digáis algo, te dejo mirado
a la pared con el culo al aire después de la paliza que te dé – le
dijo muy enojado elevando un dedo
- ¿Y porque me amenazas nada más que a mí? – respondió
Noel medio molesto porque su padre solo se dirija a él
- No te amenazó… ¡te advierto! porque eres el único
que me pones impedimentos – Noel colgó el morro y no hablo
más del asunto
Y cuando Abraham bajo por fin todos desayunaron sin
mencionar el asunto, tras eso papá decidió que él los llevaría al cole algo que
tomo por sorpresa al mayor, pues Moisés tenía otros planes, aprovechar que el
resto se vaya al cole como siempre e irse por su cuenta y encontrarse con
Almudena, pero ahora papá estaba a punto de echar a perder sus planes, así que
decidió hacerse el remolón para cuando saliera su papá y hablar con él.
- Papá ¿Puedo ir yo solo? – pregunto y
Ramón se dio la vuelta para mirarlo, aquello era extraño, por lo general
adoraba que su padre los lleve
- Moisés hijo mira la hora que es – respondió
pensando que su hijo quería solo caminar
- Papá por favor – le rogo poniendo
una cara de criatura que a cualquiera conquistaba
- ¿Qué pasa? ¿Por qué quieres irte por tu cuenta?
– quiso saber su padre así que se quedó frente a él
esperando una respuesta
- Verás yo… yo quiero acompañar a Almudena, me está
esperando a dos calles de aquí – pero Ramón sospechaba que
había algo mas
- Moisés que te conozco ¿qué ocurre? – le
pregunto elevando una ceja, Moisés dudo de contarle pero sabía
que era el único que lo apoyaba en esta relación
- Es que solo yo – empezó dudando, al
final decidió decir la verdad, para que mentir, seguro se enteraba tarde o
temprano y se enojaría con él – veras
papá… nos íbamos a pasar el día juntos, no íbamos a ir a la escuela
– confeso
- Moisés – le amonestó Ramón
- Papá solo era hoy, ya en las clases no se hace nada
estamos a punto de empezar las vacaciones – Ramón soltó el
aire su hijo estaba confiando en el, pero no lo iba a dejar hacer una
estupidez
- Moisés hijo – le dijo papá dándole
un abrazo y un beso cariñoso en la frente como diciendo, te entiendo yo
también tuve tu edad – aunque yo
alzará las manos y me hiciera el loco en esto, ¿cuánto crees que tardaría
su papá en enterarse que no entro a las clases y armaría un escándalo?
- En cuanto llamarán a casa de su padre – respondió
Moisés con la cara entristecida
- Anda llámala y le dices que la recogemos – ordeno
su padre con cariño acariciando su mejilla – ya verás como encontráis la manera de veros durante las
vacaciones – agrego viendo a Moisés empezar a mandarle
mensajes a su novia
- Noel tu adelante conmigo – sugirió
su padre al segundo de sus hijos recibiendo una mirada enojada de parte de
Noel
- Yo no hice nada – reclamo y Ramón le
pasó el brazo por los hombros
- Yo no he dicho que ellas hecho algo solo que quiero
que estés conmigo adelante – Ramón sabía que cuando
recogieran a Almudena, esta podría hacer algún comentario inadecuado por
eso prefirió llevárselo adelante, cosa que no le gustaba a Noel, pero
igual se subió de mala gana
- ¿Dónde está?
- Dos calles paralela a esta – respondió
Moisés muy entusiasmado, después de todo recogería a su chica como todo un
caballero
- ¿Dónde vamos? – pregunto Noel
mirando desconfiado a su papá
- A recoger a una amiga de tu hermano – y como era
de suponer, Noel apretó los dientes
- Claro como es tu favorito nada que hablar, pero si
te lo digo yo ya sería otra cosa – lo acuso a punto de
llorar y Moisés se sintió mal cuando su hermano dijo eso
- Noel hijo yo no tengo favoritos y si me lo pides también
pasamos a recoger a quien tú quieras – pero no lo convenció y
Noel apretó los puños
- Mentiraaaaa – grito con rabia
- Noel claro que – “si” iba a decir
Ramón pero se quedó sin terminar la frase porque Moisés vio a su novia y
lo interrumpió con demasiado entusiasmo
- ¡Papá ahí está Almudena! – Ramón
prefiero callarse no quería que hubiera conflicto delante de la chica y
estaciono a un lado para que Moisés la invite a entrar a la movilidad
- Buenos días – saludo Almudena
- Buenos días – contesto Ramón y
también Abraham menos Noel, pero papá no le dijo nada aunque sabía que
estaba siendo grosero pero no quería enfadarlo más de lo que estaba Noel,
así que decidió ignóralo un rato y observo detenidamente a Almudena
alegrándose por Moisés, su chica era muy guapa… al parecer su hijo tenía
buen gusto
Unas cuantas cuadras más y llegaron al colegio y Noel salió
disparado de la movilidad sin que Ramón pudiera decirle nada y Moisés se
dispuso hacer las presentaciones del caso como creía merecían su padre y su
novia.
- Almudena este es mi papá – le dijo
nervioso con una sonrisa
- Mucho gusto – saludo ella apretando
la mano de Ramón
- El gusto es mío – sonrió Ramón
dándole dos besos
- Y este es mi hermano menor – señalo
a Abraham que lo andaba codeando para que lo presente
- Hola eres muy guapo – saludo
Almudena haciendo que Abraham se sonroje
- Ho hola tú también eres muy linda – devolvió
el piropo
- Y el que acaba de irse corriendo es Noel mi hermano
mediano pero tienes que disculparlo hoy está con la regla – agrego
moviendo los hombros como diciendo “es un loco”
- ¡Moisés! – reprendió su papá molesto
- Pero es que
- Es que nada – lo
corto Ramón, a él no le gustaba que dijeran esas cosas, era como si
ofendiera a las mujeres pero a Almudena le dio una risita el regaño de
Ramón y bueno Ramón no dijo nada más, solo quedaba despedirse –
bueno es hora de hacer mis cosas – agrego
todavía mirando serio a Moisés y luego se acerco al menor –
Abraham a la hora de la actuación vengo vale mientras voy a solucionar
unas cosa al banco
- Vale ¿Pero si vas a venir, verdad? – pregunto
dudando mientras miraba a su padre con ojos de suplica, es que esto era
importante para él
- ¡Claro que sí hijo! – le aseguro – no me lo perdería por nada del mundo – dijo
revolviéndole el pelo
Tras eso los chicos se fueron con dirección al colegio,
Ramón el subió al coche para hacerle una visita a su esposa y ver si la
convencía de acompañarlo, pero cuando llegó allí no estaba, estaba solo la
encargada y las costureras cosa que puso en apuro a la chica, pues solo le pudo
decir que salió pero no sabía a dónde, así que Ramón decidió llamarla.
- ¿Pasa algo? – pregunto Rebeca al
contestar la llamada
- No, nada… solo vine a verte – respondió
Ramón subiendo a la movilidad
- Lo siento amor tuve que salir hacer unas gestiones
– estaba nerviosa, no
quería que salieran a llamar a la consulta, no quería que nadie lo supiera
- Está bien, pero ¿no crees que terminaras antes y ir
a ver a Abraham? – insistió Ramón y Rebeca solo suspiro
- Ramón no voy a terminar con tiempo… ya hablamos
anoche – le dijo en tono de queja, de verdad que esto era
incomodo para ella – y aunque pienses
que no, yo también quiero a mis hijos pero se me hace imposible ahora
partirme en dos – agrego tratando de oír a la enfermera
- Vale, vale… ya le diré que no alcanzaste a ir, nos
vemos en casa – se despidió
- Adiós Ramón – y colgó rápidamente la
llamada
Ramón regreso al colegio solo, tenía la esperanza de hacerlo
con Rebeca pero al parecer estaba en medio de algo que no podía posponer; se
fijo la hora frunciendo el ceño, tenía tiempo de sobra para esperar pero no para
volver a casa, así que decidió tomarse un café cerca del colegio y hacer
tiempo hasta que llegue la hora que cantará Abraham, mientras se dedico a jugar
sudoko con el periódico hasta que fue tiempo de entrar a ver a su niño.
- Ya van a cantar – le dijo Noel
olvidándose del enfadó con su papá que para Ramón fue un alivio ya que no
tenía idea por qué se comportó así pero ya no importaba, solo ver la
actuación de su hijo y disfrutar de los otros dos, es que cuando Ramón
llego a gimnasio sus hijo alzaron la mano para que fuera con ellos y así
lo hizo
Ramón como todo padre estuvo muy atento y angustiado
también, prácticamente estaba viviendo el estrés de Abraham como si fuera una
presentación suya en el teatro, pero no dijo nada y procuro calmar sus nervios,
cosa que sucedió a media que se dieron las cosas; para suerte de todos, el
primero en cantar fue el otro chico lo que ayudo a Ramón a ubicarse junto con
sus otros dos hijos en un mejor lugar para que Abraham lo vea, es que
conociéndolo como lo conocía sabía de antemano que estaría nervioso y no lo
defraudo, cuando llego su hora Abraham empezó a ponerse nervioso y su mirada
fue para todos lados hasta que Moisés empezó a levantar la mano, cuando Abraham
lo miro se dio cuenta que al lado de sus hermanos estaba su papá; una enorme
sonrisa se le dibujo en la cara sobre todo cuando su padre le dijo “tranquilo”
con los labios y elevo su pulgar, fue cuando la música empezó a fluir en medio
de un silencio absoluto y él empezó a cantar su canción.
Se le veía un poco nervioso y papá levantó de nuevo los
pulgares diciendo que estaba saliendo bien lo que tranquilizó mucho a Abraham,
sobre eso a medida que iba cantando con toda la pasión que sentía,
cerrando los ojos, flotando en la música se sumo el griterío histérico de
muchas niñas que se declararon automáticamente como sus Fans, al
finalizar la canción todo el mundo se paro y le aplaudió con entusiasmo, aun
así a la salida habían varias urnas para cada curso donde los estudiantes
podrían dar su voto por la canción que más les gusto y como esto llevaría su
tiempo, Ramón aprovecho el tiempo con su hijo saliendo al patio del colegio
mientras esperaban que sus hermanos emitan su voto, por él claro.
Al cabo de media hora salieron el director y el maestro de
música, subiéndose ambos a un pequeño escenario que pusieron con un micrófono,
al verlos todos los alumnos de todos los cursos, los profesores y los padres
del otro chico se fueron asomando al medio del patio; Abraham por un momento le
tuvo envidia su compañero porque estaba arropado por su papá y mamá y sintió un
poco de enojo porque su madre no pudiera dejar su trabajo unos minutos para ir
a verlo, seguro que los padres de su compañero también trabajaban y aun así
estaban juntos, pero sus lamentaciones fue interrumpidas cuando el
director golpeo suavemente el micrófono llamando la atención de todos.
- Bien, ya tenemos los resultados, como saben estamos
aquí para decir quién fue el ganador con las votaciones que ustedes
dejaron en las urnas – hablo el directos abriendo el sobre
que le entregaron los maestros que contaron los votos, haciendo ya no mas
el anuncio – y el ganador es – dijo
cediéndole el paso al profesor de música
- El ganador es… – repitió el maestro
a tiempo que un redoble de tambor sonó al fondo, uno de los estudiantes
estaba ahí justo para eso, mientras que Abraham cerró los ojos cruzando
sus dedos y el maestro permaneció en silencio por unos minutos para darle
más emoción a la cosa – Abraham
Cortez
Abraham salto al cuello de su padre sin importar lo que sus
compañeros digan, Ramón lo abrazo de vuelta felicitándolo sus hermanos y más
compañeros se acercaron para felicitarlo menos su rival a quien se lo veía muy
malhumorado, aun así los padres de chico lo felicitaron sinceramente, después
de eso Abraham subió a la tarima y dio las gracias todos muy emocionado, tras
eso todos regresaron a las aulas a terminar las clases
Ramón después de hablar con Rebeca volvió a recoger a los
chicos para almorzar en conjunto, su mujer se quedaría en el trabajo a almorzar
con sus empleadas porque tenían trabajo acumulado y eso si era cierto, con eso
en la cabeza Ramón pensaba pasar una buena y amena tarde con sus chicos,
desgraciadamente no fue así, porque sin querer despertó los celos de Noel, es
que Ramón no le pregunto absolutamente nada sobre su día concentrándose solo en
felicitar doblemente a Abraham (orgullo privado de que su niño herede su vena
artística) e intrigado en como lo paso Moisés con su novia en el cole… un error
que luego lamentaría.
- En hora buena hijo – dijo Ramón
apenas se sentaron en el comedor, era la segunda vez que felicitaba a
Abraham – lo hiciste muy bien
combatiste tus nervios – la charla iba por ahí, sabía que
el menor tenía un poco de pánico escénico pese a que amaba bailar, pero
Noel enojado porque si padre ni le haya preguntado cómo le fue en el
examen que ese día rendía no le dio tiempo a su hermano menor a contestar,
en vez de eso decidió vengarse
- Si – le dijo Noel mirando a Abraham – al principió tenías la cara igual de roja que ayer
tu trasero – agrego con
rabia no le coci que papá no le pregunte nada, Ramón cerró los ojos seguro
de oír el chillido del menor y Moisés no pudo aguantar la risa, tanto así
que se puso la mano en la boca para que su padre no se diera cuenta, pero
no pudo dejar de reír hasta que Abraham reacciono empujado a Noel
- ¡IDIOTA! – empezó
a empujar a su hermano – ¡GILIPOLLAS!
- ¡Ya Abraham! – amonestó Ramón por el
tono de sus insultos
- ¡Claro! encima me regañas a mí – y
otra vez fue a pegarle a su hermano, pero papá lo cogió del brazo y le
planto tres nalgadas
- Plaf PLAF PLAF – y Abraham miro a su padre enojado pero dejando de
golpear a Noel – de eso me ocupo yo
- MENTIROSO – le grito con coraje y
salió escaleras arriba a su habitación, mientras que Noel se puso serio
sabía que su papá no hacía las promesas en vano
- Creo haber sido claro ayer y hoy en la mañana ¿No?
– le dijo a ambos quedándose la sala en silencio, Ramón se
preguntaban ¿en qué momento las cosas se volcaron de esa manera si lo
estaba pasando bien con sus hijos?, ¿por qué tenía que ser ahora el padre
estricto?, pero se los advirtió y no estuvo bien que Noel se burlara así
de su hermano, para eso Noel ya estaba arrepentido, no porque su padre lo
iba a castigar si no por lo culpable que se sentía de ver a su hermano con
la cara que puso – ¿no me vais a
responder? – pregunto –
muy bien Noel al rincón y tu ven aquí – señalo a Moisés
que se quedó sin que las palabras salieran de su boca
- Queeeeee yo ¿Por qué? – no entendía,
esto tenía que ser un error, el no dijo nada
- Por reírte de tu hermano, se los advertí – les
contesto mientras jalaba a Moisés que abría y cerraba la boca
- Yo no le dije nada
- No pero no dejaste de reírte – Ramón
lo cogió del brazo sino no iba a dejar de discutir con Moisés – y ¿tú? ¿tampoco volverás a hacer caso? – le
dijo a Noel mirándolo con una ceja elevada y Noel se fue a una de las
esquinas de la sala mientras Ramón desabrochó el pantalón de Moisés y lo
tumbo en sus piernas después de sentarse en el sofá
- No es justo no es justo – se quejaba
Moises, pero Ramón hizo oídos sordos
- PLAF PLAF plaf plaf plaf plaf PLAF PLAF PLAF plaf plaf
PLAF plaf – se la daba de un cachete a otro sin hablar y
sin regañarles más, ya sabían porque los castigaba – plaf PLAF PLAF PLAF plaf plaf plaf plaf plaf PLAF PLAF
PLAF PLAF PLAF PLAF plaf plaf plaf plaf PLAF PLAF
- Ya papá ya shisj shisj ya – se
quejaba Moises
- PLAF PLAF plaf plaf plaf plaf PLAF PLAF PLAF plaf plaf
PLAF plaf – pero Ramón siguió en lo suyo
- Buuuuuaaa – Moisés ya empezó a
llorar dándole igual que su papá y su hermano lo oigan llorar y Noel se
sentía más culpable todavía pues papá estaba castigado a su
hermano por su culpa
- PLAFFF PLAFF PLAF PLAF – con esas cuatro
Ramón término y lo puso de pie, Moisés cogió la ropa para colocarla pero
Ramón se lo impidió – no la ropa
se queda donde está – le dijo y lo llevo al lado de
Noel para que se quede en su lugar, cogiendo a Noel poniéndolo en la misma
posición de su hermano
- PLAF
PLAF plaf plaf PLAF PLAF plaf plaf PLAF plaf plaf plaf PLAF PLAF PLAF plaf
plaf PLAF plaf
- Spiii shsjj – Noel casi desde el
principio empezó a llorar haciendo más difícil a Ramón castigarlo, no le
gustaba oír a sus hijos llorar siendo él, el causante
- PLAF
PLAF plaf plaf plaf plaf PLAF PLAF PLAF plaf plaf PLAF plaf
- Paaaapi pero no lo hago massss buaaaa – Ramón
tenía que terminar pronto con Noel o no podría seguir con el castigo de
sentirlo llorar
- PLAF
plaf PLAF plaf PLAF PLAF PLAF plaf plaf PLAF
- AAAYYY ya papá ya
- PLAF
PLAF PLAF
- Lo sieeeeento – y Ramón lo puso de
pie
- De mí no te tienes que disculpar sino a tu hermano
– advirtió y Noel lloro con más ganas
Se sentía culpable por sus dos hermanos pero también tenía
rabia, se sentía desplazado por ambos; Ramón le dio pena verlo llorar de esa manera,
así que le limpio las lágrimas con la mano le dio un beso en la cabeza y lo
llevo al lado de su hermano y regreso a sentarse en el sofá a los pocos minutos
se sintió la llave en la puerta y Moisés lloro de nuevo.
- No llores Moisés es mamá la única que puede entrar
con llave – le dijo Noel a manera de consuelo
- Por eso idiota – respondió Moisés
molesto y muerto de vergüenza
- Silencio en la esquina no se habla – les
dijo Ramón, los estaba escuchando murmurar y no quería un enfrentamiento
entre ellos nuevamente
Rebeca entró y lo primero que vio fue el trasero de sus
hijos en pantalla, pero evito hacer algún comentario, solo movió la cabeza y se
acerco a donde estaba su marido y le dio un beso luego se acercó donde sus
hijos le dio un beso a Noel que estaba primero y luego a Moisés.
- Parece que no entendéis las cosas y mira lo que pasa
– dijo recién
- Pero yo no hice nada shisj shisj yo solo me reí
– se quejo Moises llorando peor que antes, lo que le dio
pena a Rebeca quien miro a su marido para que le de permiso
- Anda súbete la ropa – murmuro
sacándolo de la esquina cuando Ramón acepto aquello, y otra punzadita le
dio a Noel a él lo dejaba ahí
Pero no era preferencia, en realidad Rebeca quería hablar
con Moisés, así que lo acompañó a su habitación dejando a Ramón con Noel
contento de que se dé la oportunidad para que Rebeca y Moisés hagan las paces,
así que se volvió a acomodar en el sofá mirando a Noel llorar, un llanto que se
hizo mayor cuando pasados 15 minutos el muchacho empezó a ponerse nervioso no
solo porque la parecía estar parado por horas, sino porque los compañeros de
trabajo de su padre no tardarían en llegar a casa.
- Papiiii shisj – empezó otra vez a
llorar
- ¿Qué pasa?
- Déjame salir ya van a venir tus compañeros – le
dijo con un llanto desconsolado eso si sería lo más vergonzoso de toda su
vida
- Pues lo hubieras pensado antes Noel, fui claro cuando os
lo dije
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