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Cambios
Autor: little writer
Capítulo 5 Tío John
Sophia no se quedó mucho tiempo después de negarse a beber o comer algo, se marchó de mi casa, Brandon salió de su cuarto y se me quedo viendo con una sonrisa y una mirada extraña.
-¿que? -dije preocupado por su constante contacto visual.
-¿cómo te fue romeo?
-no entiendo tu pregunta, por favor se más específico.
-bueno mi querido hermanito una chica linda viene a verte y tú te volviste mi chef personal para recibir visitas, te gusta es algo obvio.
-cuando me volví tu chef personal-alce una ceja.
-cuando convenciste a papá de cocinar para mí para que ella te visite-dijo viendo sus uñas.
-el trato es por el desayuno y almuerzo no cocinar para ti-será posible que no se dé cuenta.
-¿cuál es la diferencia?
-que yo decido que comeremos, yo preparo los alimentos y los pongo en un platillo que tu tendrás que comer sin importar lo que sea.
Quise ir a mi cuarto necesito planear mi escape de mañana, sin embargo, cabeza de musculo no tenia en sus planes dejarme en paz.
-no, no, no quiero un filete para la cena-demando.
-y yo una Pegaso de mascota, nadie tiene lo que quiere en esta vida, a tu edad ya deberías saberlo.
-oye.
-¿que? que rayos quieres quiero estar solo.
-huy que humor déjame darte unos consejos de amor y ella será tu novia.
-paso… ya déjame pasar- me queje ya que no me deja pasar.
-oye solo quiero ayudar, ella te gusta verdad, con mis consejos harás que ella se enamore de ti.
-ya es mi novia, tu oferta es tan inútil como tu -dije molesto.
-oye solo quiero ayudarte cálmate.
-púdrete.
-disculpa.
-te disculpo, ¿quieres dejarme en paz? eres un fastidio.
-y tu un malhablado.
-lo que digas.
Me fui a mi habitación ignorando los reclamos de Brandon comencé a pensar en mi plan de fuga hasta el momento tengo treinta posibles opciones de las cuales once son factibles, quince son buenos, pero tienen fallas y puede que sean moralmente cuestionables, y cuatro de los cuales tres dependen de la suerte y el ultimo tiene demasiadas variables como para ser viable.
Si mis conjeturas son correctas padre está en medio de algo serio o no puede tomar días más días libres, por lo que lo único que debo hacer es convencer a alguien para que mienta por mi si vuelve antes de lo previsto.
Si me equivoco tendré que intoxicar a Brandon, para sacar a padre de casa y poder escapar, pero el tiempo de respuesta tanto de padre como de los médicos es incierto y no tengo tiempo para realizar pruebas, lo mejor sería provocar un accidente lo suficientemente grabe como para llevarlo a emergencias.
Sin percatarme estuve pensando en cómo enviar a Brandon al hospital por algunas horas y algunas de mis ideas eran más violentas de otras ideas debo admitir, pero ninguna mortal, pese a todo aun le quiero di-digo el… aun es un peón útil, si eso es solo un peón ejem.
Cerca de las cuatro treinta, cabeza de musculo tuvo la osadía de irrumpir en mi habitación.
-ponte algo más nos vamos en cinco- y salió tal como entro.
Lo ignore naturalmente si quiere que lo acompañe mínimo debe avisarme al lugar donde vamos, me quede viendo la caja donde están, guardados Stephen, Tomas, y mis otros amigos di-digo eh, preciados recuerdos ejem si eso.
Me senté en la cama ignorando la petición de Brandon no sé qué quiere y no me interesa, tampoco encuentro beneficios al acompañarlo a un destino incierto.
-porque no estas listo-dijo entrando nuevamente.
-porque no quiero acompañarte.
-no te pregunte-espeto.
-¿no? no lo hiciste-respondí.
-apresúrate y ponte algo más ¿quieres?
-no, no quero.
-LUCAS-me grito.
-QUE BRANDON- respondí molesto-puedes no gritar estoy justo aquí sabes.
-dije que te apresures.
-¿y por qué debería obedecer ciegamente tus ordenes? -cuestione-¿ qué te crees?.
-no me creo nada SOY TU HERMANO MAYOR.
-¿qué parte de no grites no entendiste?
-¿qué parte de apresúrate no entendiste?
Nos quedamos viendo fijamente, no me deje intimidar por él y que si es más alto y físicamente más fuerte y que si es mayor no puede darme ordenes solo porque sí.
-¿puedes obedecer? por favor.
-no quiero.
-no quiere, no, arg, solo obedece lucas.
-¿por qué debería.?
-porque estoy a cargo.
-no lo estas.
-si lo estoy.
-no.
-si.
-esta discusión es estúpida-dije molesto porque cabeza de musculo no me deja en paz.
-lo es, puedes por favor ponerte algo más, no sé, formal.
-no quiero.
-Lucas por el amor de…, arg-dijo exasperado por alguna razón
-por qué quieres que me vista más formal en primer lugar, en segundo lugar, a donde vamos.
-iremos a recoger al tío…
-NO POR FAVOR DIME QUE NO ES EL TIO ALL-dije perdiendo el control.
-NOOO, niño no que ideas tan aterradoras tienes-dijo Brandon.
Ejem bueno el tío All no es alguien malo, si lo ves desde el lado legal y es moralmente correcto, pero, es militar y estar con él es un fastidio se le subió a la cabeza eso de ser militar las pocas veces que quede a su cuidado fueron horribles… no podía comer galletitas o sándwiches.
-iremos por el Tío John.
-oh-exclame- no quiero, no iré.
-Lucas.
-que quieres.
-tienes que ir el Tío John se molestara si no vas.
-no me es útil por lo tanto… olvídalo dame unos minutos-reflexioné.
Tío John es el hermano mayor de papá, pero él es más relajado esta soltero y es un gran psicólogo, según sus propias palabras, tal vez si pueda serme útil.
En cuestión de minutos me puse algo menos informal y Sali escoltado por cabeza de musculo, pasaron por mi mente múltiples ideas de como fugarme ahora y volver después del juego, pero papá esta extraño, se ha vuelto impredecible en ciertos aspectos especialmente con los relacionados a mi persona.
Y puede que cierta parte de mi anatomía siga molestándome, decidí que esperaría ya trace un plan sólido y viable, asi como dos planes de respaldo no hay motivos para improvisar.
Sin pretenderlo me quedé dormido y comencé a soñar con mis recuerdos una vez más.
Dentro del recuerdo.
Pov Lucas 5 años
Me encuentro en casa de tío All poque papi está atrapando tipos malos que producen polvitos malos ups no debo decirle a nadie.
Pero el tío no me deja comer galletitas y yo quiero galletitas, Stephen también quiere comer galletitas, entonces estamos escondidos debajo de la mesa comiendo galletitas. Tío All no me deja comer galletitas entonces abrí la pueta pu-e-ta, pu-er-ta.
Deje salir a su perrito, el perrito grande y malo salió a perseguir al gatito de la señora de la casa de al lado y cuando tío All se fue yo alcance las galletitas y las comparto con Stephen.
-¿qué haces allí abajo? -dijo Bandon creo que me encontró.
-comemos galletitas, ñam.
-¿?me das una-pidió.
-ño.
-Hey quiero galletas-dijo molesto.
-ño me inpota-abrase a Stephen y me prepare para correr.
-dame galletas, no sea glotón enano.
-ño.
tomé las galletas restantes y le di una patada al frasco de galletas, Brandon se distrajo con el frasco vacío, Stephen y yo corrimos hasta el sillón.
De Pronto sentí que Me sacudían y me desperté de golpe, recuerdo que me atraparon por las migajas que deje en el sofá y tío All me regaño y me dejo en una esquina sin Stephen, para mí en ese entonces fue horrible.
-oye, oye despierta dormilón-tarde unos momentos en enfocarme en quien me hablaba.
-mm-espera que hace el aquí.
-despierta-dijo padre-luego puedes seguir durmiendo si quieres.
Me hiso salir del auto y me llevo hasta dentro del aeropuerto donde nos esperaba Brandon con un cartel con el nombre del tío John, me pregunto cuando lo escribió
- ¿no tienes trabajo? -cuestione.
-bueno me deben algunos favores.
- ¿tus peones te cubren? -cuestione conteniendo un bostezo.
- ¿peones?
-sí, ah cierto tú y cabeza de musculo los llaman amigos.
Padre no dijo nada solo me ve firme, ahora que le pasa… será la edad o es bipolar nah debe ser estrés si eso debe ser.
-me gustaría que dejaras de poner apodos a las personas-comento con molestia.
-no son apodos.
-aah, y que son.
-sus etiquetas, digo no es como si me molestara en recordar algo tan inútil como sus nombres.
- ¡Lucas!
-¿sí? en que puedo ayudarte
-ya lo vi-dijo Brandon.
Y allí estaba, arrastrando una maleta, ropa desaliñada despeinado y con bello facial considerable, una imagen que grita depresión a lo grande, Si ese es el tío John.
Hasta ahora llevaba una infancia normal, en qué punto se quebró la relación de padre e hijo
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