Al cuidado de mis hermanos capitulo 1

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 Al cuidado de mis hermanos

 Autor: :little writer.

 Capítulo1 Regresando de la escuela

 

 

 

En un salón de una costosa escuela podemos observar un grupo de adolescentes algunos se ven preocupados, algunos angustiados y también una minoría que parece indiferente ante la situación.

Cuál es la razón de todas estas reacciones simple el examen de matemáticas.

-jóvenes les quedan veinte minutos-dijo el profesor, ganándose algunas miradas furiosas.

Si observamos más de cerca a la minoría que parece indiferente a la situación podemos observar a un joven de aspecto más infantil en comparación a sus compañeros, quien es bueno él es Máximo Brennan blakwood un joven de quince años que actualmente ve de manera desinteresada el examen.

Máximo pov.

Hola soy máximo Brennan blakwood, pero me pueden llamarme Max, tengo quince años si ya sé lo que están pensando, pero si tengo quince años no doce como muchos creen.

La cosa es que yo nací prematuro, mama tuvo un accidente automovilístico ella fue a dar al hospital ella no sobrevivió, pero yo estuve en una incubadora por algunas semanas y un par de días.

Mi padre no pudo hacerse cargo de mi o eso dicen mis hermanos sospecho que me ocultan algo no sé qué es, pero lo descifrare algún día. 

En cuanto a mí, bueno mi sistema inmune no se desarrolló tan bien como debería lo cual me hace propenso a enfermarme, por si no fuera poco con parecer un niño también me resfrío con mucha facilidad.

Termine mi examen en los primeros quince minutos solo espero para entregarlo, no me gusta llamar la atención, aunque voy dos años antes de lo que debería en el cole, mis compañeros tienen diecisiete años no es bueno destacar mucho.

Bueno no es que se me acerquen mucho de hecho apostaría que l mitad del salón me ven como él bebe del salón y la otra mitad como el cerebrito del salón. No es muy difícil hacerse una idea de mi inexistente vida social.

Se que voy a aprobar el examen, una vez entrego el examen me puedo retirar, en mi colegio se acostumbra a realizar todos los exámenes una semana y matemáticas es mi último examen por lo que me puedo ir a casa.

Me pregunto, que, si alguno de mis hermanos estará en casa,

Ah, sí lo olvidaba mis hermanos son.

Mark él es el encargado del negocio familiar, una exitosa cadena de hoteles de cuatro y cinco estrellas en los ángeles, o como yo le llamo el imperio blakwood, obviamente no lo hace solo un par de mis tíos lo ayudan.

Luego esta mi otro hermano Andrew con su clínica o como sea que se llame, él es cirujano plástico con un grupo de amigos son bastante famosos,

Y, por último, pero no menos importante mi otro hermano Eduard, él es médico y también tiene su propio consultorio, también es muy bueno en lo que hace,

Y ese sería el trio de oro como les llaman los medios, los trillizos blakwood son bastante conocidos por heredar la fortuna de su madre y construir sus propios imperios.

Y se preguntaran donde quedo yo bueno yo soy el hermano menor, el hermanito que ellos sobreprotegen de todo lo que sea peligroso para mi salud lo que se traduce a todo lo que este frio, el polvo, los animales ETC. Lo cual es estresante, el solo hecho de tenerlos a los tres sobre mí y sin mencionar que el espacio personal no existe en su vocabulario y juraría que el termino privacidad es un mito para ellos.

A pesar de los diferentes profesiones y personalidades, comparten el deseo por sobreprotegerme, eso y el chocolate, futbol, autos costosos, bueno a los treinta y nueve años no hay mucho que les llame la atención supongo.

Me dirijo a la salida a esperar al jefe de seguridad-tío-en-todo-menos-sangre, Taylor. El al parecer trabajo con padre, pero es muy reservado en ese tema me pregunto por qué. Taylor es básicamente mi guarda espaldas-niñera y técnicamente mi chofer personal, bueno casi, pero mis hermanos y yo le consideramos como parte de la familia.

-miren que tenemos por aquí es él bebe se te perdió el chupete-dijo alguien a mis espaldas.

Lo ignore no tiene caso seguirle la corriente, claro puedo responderles tanto verbal como físicamente, soy cinta negra en karate leo libros de psicología, tácticas de guerra estrategias militares, técnicas de tortura, eh olviden la última parte. Se cómo jugar mis cartas.

No soy un niño eh… digo un chico indefenso, se defenderme muy bien.

-no vas a responder, cobarde-me grita una chica su amiga supongo.

-y acabar con las pocas neuronas que le quedan no gracias apenas y sobrevive siendo un neandertal- respondí con frialdad.

Otro problemita que tengo es que me cuesta mostrar emociones con extraños, aunque este furioso y gritando por dentro por fuera no muestro más que frialdad y una alarmante calma, según mi psicólogo no es del todo malo con su ayuda pude expresarme más con mi familia… bueno la parte de mi familia que me cae bien.

-que dijiste insecto-grito el chico de antes.

-ah cierto seguramente no entendiste un cuarto de todo lo que dije lee un diccionario o dos… digo si recuerdas como leer-dije para provocarlo.

A juzgar por el sonido de sus pasos viene hacia mi dirección corriendo, por lo que intencionalmente me detengo cerca de los casilleros.

-hijo de puta-grito lanzando un puñetazo.

A lo que respondí moviendo unos centímetros atrás dejando que me rose su puño y el termine golpeando los casilleros.

-AAHHH.

Mientras él se lamenta de su mano yo me retiro y me voy de la escena antes que llegue un profesor.

-otra vez lo hiso-murmuro alguien.

-otra víctima del mocoso-murmura otra persona.

-fue un buen movimiento-dijo alguien más.

Que no tienen nada más que hacer.

Una vez lejos del chico y su amiga, me permití sonreír ante un plan bien ejecutado, astuto si lo soy, manipulador si, lo soy si lo admito lo soy, pero si no lo fuera me harían la vida imposible.

-todo en orden Max-dijo Taylor seguramente escucho alguno de los comentarios de mis queridísimos  y entrometidos compañeros. 

-nada que no pudiera Taylor-respondí con un deje de alegría-que tal tu día.

-muy bien Max-dijo abriendo la puerta del del auto.

-Podemos ir por hamburguesas.

-no creo que sea buena idea Max Mark llegara pronto y preparara el almuerzo para Ud. y sus sobrinos-dijo una vez entro al auto- no creo que le agrade que se salte el almuerzo.

-ya que-respondí algo malhumorado.

-en la guantera hay galletas si gusta-dijo sin perder su tono amable.

Ese comentario me molesto, no porque el hombre se preocupará por mí, sino porque siempre me tratan como a un niño, hasta mis sobrinos tienen más libertades y son dos años menores que yo.

Ellos si van a fiestas, salen muy seguido con sus amigos, y se saltan comidas de vez en cuando.

en prime son fiestas infantiles con inflables y esas cosas,

  en segunda Lucas y Carlos o algún otro guardaespaldas los acompañan.

Y tercero si se saltan comidas es porque ya comieron algo ya deberías saberlo. 

Conciencia de qué lado estas.

Del lado de la razón y por cierto estas actuando como un niñito.

Cállate y que si lo hago.

Y luego te quejas de cómo te tratan como un niño, pero te comportas como uno, cuantas veces tengo que decirte que actúes más como alguien más acorde a tu edad.

No te dije que te callaras.

Discutir conmigo mismo no ayuda en nada para cuando me di cuenta ya estábamos en casa.

-gracias por pasar por mi Taylor -me despedí rumbo a mi habitación.

-es mi deber Max- se limitó a decir.

Subí a mi habitación y por más que quisiera poner el seguro y encerrarme en la habitación la puerta no tiene seguro, otra de las tantas formas de protegerme de mis queridísimos hermanos, lo que se traduce a 0 privacidad.

Mientras subía a mi habitación vi un cuadro de Mark con su exesposa y sus hijos, no pude evitar poner una mueca al recordar a la madre de ms sobrinos.

Angelica la exesposa de Mark solo se casó con él por su dinero porque según ella la casa donde vivimos actualmente era de su víctima, perdón de Mark, pero vaya sorpresa se llevó al enterarse que esta casa es mía.

Mis hermanos antes de ser los famosos trillizos Blakwood pasaron por mucho una de ellas fue mi custodia. Ellos, según se, tenían veinticuatro años cuando murió papa ellos dicen que papa me cuido alrededor de un año y luego no pudo seguir cuidándome.

Los hoteles cayeron a manos de los trillizos, pero solo a Mark le intereso la hotelería, sus hijos son Alexander Noah y su hija Cristina. Angelica decidió divorciarse sin ninguna razón y el juez le negó la custodia de Alexander y Noah, pero si la de Cristina, Mark ve a su hija una vez al mes.

Los minutos pasan y la alarma instalada en casa me hace saber que alguien llego a casa, no mencione la alarma, bueno es otra manera de mantenerme seguro, bueno eso dicen mis hermanos.

Mark llego y una idea surge en mi mente y no es una muy buena idea, no sé cómo reaccionaran esta vez mis hermanos, veamos hoy es viernes comeremos juntos como de costumbre luego pasaremos el fin de semana en familia.

Intento distraerme, intento no pensar en eso, en preguntar de una vez por todas quien es o era mi padre. En mis quince años de vida solo me han dado respuestas vagas o historias poco creíbles.

Estoy jugando con fuego y estoy dispuesto a quemarme con tal de obtener respuestas, analizo los pros y los contras y llegue a la conclusión que si juego bien mis cartas puede que lo consiga.

Tomo un libro que estoy terminando y bajo al comedor.

Al bajar tal como suponía Mark estaba cocinando lo que parece ser lasaña, Mark cocina muy bien y yo también cocino muy bien, en serio las sopas instantáneas que Mark compra para emergencias me quedan deliciosas.

No dije nada estaba concentrado en mi lectura por lo que me limite a sentarme cerca.

-eh hola peque no te vi llegar-dijo cuando por fin me noto.

-llegue antes estaba en mi cuarto.

-porque te sientes mal te duele algo llamo a Edy-dijo mientras tomaba mi temperatura con su mano- no tienes fiebre te quieres recostar.

-no estoy enfermo ni nada termine antes mi examen y regrese antes es todo-le informe.

-oh y estudiaste para el examen Max-interrogo.

-qué crees que hacía anoche cuando me enviaste a dormir-la irritación fue notable en mi voz.

-jugando con tus he… amiguitos en… línea o algo así. -dijo volviendo a enfocarse en la lasaña y metiéndola en el horno.

El tono en que lo dijo no hiso más que molestarme y no me perdí sus dudas al contestar.

-sabes que no tengo amigos Mark todos me ignoran solo soy el cerebrito o él bebe del curso-sin poder evitarlo me entristecí. 

-ya aras amigos Maxi ya lo veras solo es cuestión de tiempo.

-sí, si seguro-dije nada más para darle la razón.

Él se limitó a abrasarme a modo de consuelo.