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Una perfecta familia
Autora: Terry
Capítulo 32
Toño puso la tele y se sentó en el sofá viendo su programa favorito, al cabo de un buen rato llegaron Lucas y Chus sentándose también para ver la tele, inicialmente sin decir nada, pero al cabo de un rato Chus quería ver su programa, iban a pasar el gran Prix de Alemania, y quería verlo.
Chus: Cambia de canal para ver las carreras de coches – no se lo pidió, se lo ordeno y Toño lo miro enojado, sabía que lo iba a meter en problemas pero no iba a cambiar de canal, el llegó primero además no lo dejaron estar con ellos
Toño: No, lo cambio cuando termine skateboard – Chus lo miro como si Toño hubiera dicho una estupidez
Chus: ¿Que sacas viendo esos imbéciles con patineta? – y quiso quitarle el mando de la tele pero Toño lo esquivo
Toño: A mi me gusta – contesto Toño mirando de nuevo la pantalla, pero para que no digan que estaba siendo un pesado les advirtió que ya terminaba – además ya falta poco – y Chus hizo una mueca de disgusto, Lucas los miro y sabía que no iban a terminar bien y como qué, Chus no se quedo conforme quería ver las carreras ya no mas e iba a cambiar de canal si o si, así que se levantó se fue hacia Toño y de un tirón le quito el mando y cambio el canal – Idiota ¡dámelo! lo tenía yo – grito queriendo que le dé el mando; Mar y María que estaban en la cocina empezaron a oír gritos pero se quedaron a ver si ellos lo solucionan solos
Lucas: ¡Joder picha! os vais a meter en problemas – y Toño lo miro alucinando pepinillos, el nunca hablaba así
Toño: Pero yo lo estaba viendo primero – se quejo, Lucas sabía que Toño tenía razón, pero él no quería problemas y prefirió callar – ¡DÁMELO! – le repitió gritando y como Chus lo ignoro se puso delante de la tele
Chus: ¡Quítate pulga! – para esto Chus ya estaba cabreado, en eso llegó Mar y María detrás de él
Mar: ¿Que paza aquí? – los tres se miraron sin decir nada – estoy preguntando – dijo con más autoridad
Chus: No se quita de delate de la tele
Toño: La estaba viendo yo primero
Chus: Pues ahora yo
Toño: ¡Porque tú me quitaste el mando! – y Mar cansado de oír esos gritos tan chillones se fue hacia Chus le quito el mando
Mar: Pues para ninguno y os quiero en vuestras habitaciones hasta que os llamo para la cena – y Toño miro a su padre con los ojos cuadrados sin moverse como el resto – ¿queréis una invitación? – dijo con ironía y Lucas fue el primero en irse, total él no quería problemas y no estaba interesado en ningún programa así que se marcho a las escaleras
Toño: No es justo – Toño estaba indignado ¿porque no podía ver el programa si fue Chus quien empezó todo?
Mar: Toño sube y tu también Chus – Chus decidió no arruinar más las cosas y siguió el consejo, pero Toño era otro tema, a él le parecía muy injusto y lo iba a manifestar – Toño sube no quiero enfadarme contigo
Toño: Peroooo – y papá no lo dejo terminar
Mar: Pero nada sube a tu habitación – Toño se le quedó mirando
Toño: No, no voy a zubir yo no he hecho na – Mar estaba perdiendo la paciencia
Mar: Zubes o te zubo pero a nalgada limpia – pero Toño estaba que echaba humo por las orejas
Toño: No voy a subir… eres un injusto – y Mar estaba harto que no le hiciera caso lo cogió de brazo
Mar: Bueno zi quieres subir azin azin te zubo PLAF – Toño puso la mano en su trasero pero no le sirvió de nada cayó igual, pero María no estaba de acuerdo con aquello, asi que le quito a Toño para que no le castigará abrazándolo, fue cuando empezó a llorar con mucha pena y quejándose como si Mar no estuviera presente
Toño: Es que no es justo sijs shijs yo no hize nada… fue Chus shijss shijsss – realmente estaba enfadado – María quiso separarlo para limpiar las lágrimas pero no pudo porque Toño se abrazo más fuerte a ella
María: ¿Que pazo? Tesoro – le pregunto y Toño lloro con más pena contándole lo sucedido
Toño: Buuuaaa ellos shijs estaban hablando sijs shijs y Chus no me dejó participaaar…. me dijo buaaa que no era para bebés y yo me vine y shjss shjss y puse la tele y cuando vino shjs shjs me dijo que la cambiará y como no quize me quito el mando y la cambio – y a María se le subió el enojo, pero Mar comprendió que eran cosas de niños porque Luis se lo hizo un montón de veces… él tenía la tele venía Luis y la cambiaba y por mucho que lloraba no la cambiaba y si se ponía pesado le daba una colleja y fin de la historia, claro está que cuando estaba su padre eso no sucedía Luis se ponía más modosito, pero María tenía otras intenciones
María: LUCAS… JESUS os quiero aquí inmediatamente – grito a todo pulmón y Lucas se levantó de la cama con pesadez, ya le habían salpicado lo de esos dos; Chus también se levantó para bajar intuyendo que estaba furiosa y que seguro el mimado de Toño se le fue con mentiras, así que no dudo en bajar para limpiar su nombre y se dio de frente con Lucas en el pasillo
Lucas: Ziempre tienes que meter la pata y siempre zalgo zapicao – lo miro de mala manera y bajo las escaleras delante de Chus cuando estaban los tres, María le dijo que se sentarán en el sofá
María: ¿Quien va a empezar hablar? – pregunto pero los tres se quedaron callados así que disparo al que mejor conocía – Lucas ¿qué pazo? – pregunto y Lucas se enfadó creyendo que ya lo estaba culpando
Lucas: Olvídame – respondió levantándose del sofá para irse, pero María al ver cómo le contesto lo cogió de la oreja
María: ¿Dónde crees que vas? – y lo regreso al sofá
Lucas: ¡Zueltame! – chillo y María lo soltó dándose cuenta que se equivoco, pues Lucas se le quedó mirando con odio – yo no hice nada ¿por que ziempre salgo yo zapicado?, pregúntale a ellos los tienes delante – agrego Lucas respirando ruidosamente, estaba furioso con su hermana, pero María decidió ignorarlo ya hablaría con él
María: Chus tu turno ¿Qué pasó? – le dijo y Chus rodó los ojos
Chus: Joder zolo cambie de canal… no le veo el drama – pero Toño no se iba a quedar callado
¿Toño: ¿No hay drama?... yo estaba viendo ese canal y por tu culpa no pude terminar de ver mi programa – Toño cuando gritaba tenía una voz muy chillona a la que Mar le daba dolor de cabeza
Mar: Ya Toño zin gritar – y Toño miro a su padre furioso, era increíble… encima lo regañaba a él
Toño: Zi, como ziempre este idiota ze zale con la suya – volvió a chillar y Mar cansado de sus gritos lo cogió de la oreja – auu ya zueta – exigió llevándose las manos a su oreja para que lo soltara
Chus: Bueno yo tampoco vi la carrera – dijo Chus como si nada, ¿pero tendría cara dura? pensó Toño
Toño: Pero yo la tenía puesta primero… ¡hoy era la final de la competencia! – Toño se puso de pie frente a su primo con los puños apretados de la rabia – pero por ti como eres TONTO no lo pude ver – Mar cansado de los gritos de Toño y que insultara a Chus lo cogió del brazo y le solo cinco nalgadas que Toño no vio venir
Mar: ya está bueno PLAF PLAF PLAF de insultar PLAFF y de ese griterío PLAF – Toño miro a su papá con los ojos cristalizados en lágrimas
Toño: Malo – le dijo con voz temblorosa – ¡le voy a decir al abuelo que me pegas zin motivo! – amenazo y salió corriendo de la sala, Mar pensó que se lo iba a decir cuando viniera del viaje, no que iba a llamar por teléfono ya no mas
Chus hizo una mueca de disgusto, para el su primo no era mas que un berrinchudo mientras Lucas lo veía como lo que era, un niño mas chico por tres años.
Toño se fue a la cocina cogió el teléfono inalámbrico se fue a su habitación y marco el número de su abuelo importándole un pimiento si estaba en una reunión o no, su pena tenia mas urgencia.
Antonio: ¿Diga? – contesto sin dejar de mirar los papeles que tenía en la mano mientras del otro lado no se escucha nada más que unos sollozos lastimeros, hasta que por fin una vocecita hablo
Toño: Abueeeelo shjs sshjss – y Antonio tras dar un suspiro supo que lo habían castigado
Antonio: ¿Qué paza? Vaquero – y Toño ya se puso a llorar abiertamente y tan fuerte que el abuelo tuvo que retirarse dejando a su hijo y al resto de los socios para hablar en privado con su nieto – ya mi niño cálmate si no te calmas no te puedo escuchar – Toño respiro hondo hasta que estuvo más calmado – a ver cuéntame – y como siempre Toño con sus explicaciones de niño y sin parar ni siquiera para respirar empezó hablar
Toño: Hoy estuvimos fuera cuando Chus zalio de la escuela y lo pasamos bien, pero cuando vinimos a caza papá nos dijo que nos bañamos antes de cenar y cuando bajé Chus y Lucas estaban hablando y fui con ellos… pero Chus – y el abuelo movía los ojos con fastidio vaya manera de hablar, no podía ir al grano pero no le iba a decir nada, lo llamo para quejarse y lo iba a dejar que se desahogara – me dijo que no me podía enterar que no eran cozas de bebés – y Antonio se molestó un poco ya había hablado de ese tema con Chus – pero yo no le hice cazo, me fui a ver la tele a la zala y vino me dijo que cambiará de canal, le dije que no …me quito el mando y encima papá shjss ME PEGO – Antonio respiro hondo sabía que Mar no le iba a pegar de la nada, seguro empezó hacer uno de sus berrinches y Mar se lo corto
Antonio: Bueno ya no llores, luego hablo con tu papá y también con Chus pero ahora caballerete, te tengo que dejar me están esperando para una reunión – no lo estaba engañado ya había salido Luis de la sala de juntas y con señas le dijo que todos estaban esperando
Toño: ¿Cuando te vienes? – le pregunto limpiándose los mocos, solo llevaba un día fuera y ya lo echaba de menos
Antonio: Cariño cuando resuelva unos asuntos – pero no colgó, espero que Toño diga algo, menos mal se calmo y pudo despedirse – vaquero mañana te llamo ¿si?
Toño: Vale, adiós abuelo, pero no te olvides reñir a mi papa
Antonio: Hasta mañana vaquero – y recién pudo cortar la llamada
Mientras en la sala María estaba hablando con Chus.
María: Chus cariño ¿es que te gusta hacer renegar a tu primo, verdad? – le hablo sin enfado en la voz pero también muy seria porque tenían que cortar aquello, si no siempre estarían en la misma situación
Chus: Yo también quería ver las carreras de coches – y Lucas no podia creeerlo, Chus acababa de usar mismo tono infantil que Toño cuando se quejaba
María: Ya, pero encima, zi querías fastidiar porque hay otra tele en la cocina, otra en nuestra habitación y para colmo una en la habitación de abuelo así que no digas que no tenías ganas de hacer renegar a Toño – y Chus viéndose descubierto bajo la cabeza y le dijo bajito
Chus: pero mamá no me dejaba que entrara a su habitación y menos a ver la tele – no era un pretexto, era una norma y María se sentó al lado dándole un abrazo
María: A mi no me molesta que entres a ver algo que quieras ver si en la sala la está viendo otra persona y tú quieras ver otra cosa, siempre y cuando me la dejes ordenada – y Chus entendió porque le tenia manía a Toño, se sentía tan bien estar en esa casa donde todos compartían y nadie te restringía, además que le gusto ese abrazo cálido y tierno que le dio María – pero como te portaste mal, olvídate del permiso que le pediste a tu tío de salir mañana – y Chus se despego del abrazo con cara de tristeza sincera
Chus: No tía… ezo no – y miro a su tío buscando apoyo, pero este no le dijo nada como dando aprobación del castigo que le dio María – es que es importante para mí – claro que era importante había quedado con la chica que le gustaba, una que iba a su misma clase, María se lo pensó un poco
María: O ez ezo o te quedas sin móvil una semana – y eso sono peor, pero es que María no podía dejar aquello sin castigo, si no iban a seguir de la misma forma, Chus reasignado tuvo que elegir la salida ya si se quedaba sin móvil y su padre lo llamaba, se iba a dar cuenta que era porque lo habían castigado y él no quería que su papá se enterará que se había portado mal de nuevo
Chus: No salgo mañana – contesto y Lucas abrió la boca de asombro, si hace un momento le estaba contando que esa chica era fabulosa y de la invitación que le había propuesto esa tal Alba
Mar: Zi todo está aclarado lavaros las manos y vais a la cocina a cenar…Lucas ¿quieres decirle a Toño que baje? – le pidió confiado en que el mal humor de su hijo había terminado
Lucas: Zi ya le digo
Mar: Gracias campeón
Mar y María fueron a poner la mesa a la cocina y Lucas subió rápido al lado de Chus pese a estar enojado con él, pero tenía que preguntarle porque eligió ese castigo si le habían dado donde elegir.
Lucas: ¿Por qué elegiste no salir? – Chus lo miro resinado
Chus: Ez que si me quedo sin móvil cuando llame mi papá se dará cuenta que me castigaron y yo no quiero que ze enteré
Lucas:: pero hace un momento me has dicho que es chavala te gusta de verdad – Chus dio un sonoro suspiro enamorado
Chus: ZI, pero es lo que hay… ya mañana la llamo y le digo que ze me prezento un problema familiar y quedó para el día siguiente – pensándolo así, Lucas lo vio como una buena idea
Tras aquello Chus fue a la cocina y Lucas subió a llamar a Toño que tenía la puerta abierta, por lo que no tuvo que llamar, solo se asomó a la puerta y ya.
Lucas: Toño tu papá dice que bajes a cenar – Toño lo miro enfadado y triste sentado desde su cama
Toño: No tengo hambre – Lucas lo noto triste y entro sentándose en el filo de la cama
Lucas: Mejor baja Toño y azin no ze enfada tu papá – le aconsejo acariciándole la pierna, no entendía por qué Chus le gustaba hacerle rabiar si Toño era muy dócil
Toño: Me da igual que ze enfade – respondió frunciendo el ceño y eso si era una novedad o bueno, eran los primeros síntomas de la pre adolescencia, algo asi como calentar motores – me pego de la nada… ziempre paza igual, Jesus ze mete con migo y yo zoy el que cobro – a Lucas por un lado le hizo gracia pero no quiso reírse para que Toño se creyera que se reía de él es que estaba hablando como si se fuera llevado una paliza memorable, pero por otro lado lo entendía a su edad tampoco le gustaba que lo molestaran
Lucas: Bueno como quieras, pero ze va a enfadar – se levantó y salió de la habitación y bajo a la cocina, cuando entro y Toño no entró detrás pregunto por el
Mar: Y Toño
Lucas: Dice que no tiene hambre – Mar suspiro ruidosamente frotándose la cara y subió a la habitación de Toño como estaba abierta entró sin tener que llamar
Mar: ¿Que paza? Churri – Toño lo miro e hizo a un lado la cara, y Mar se dio cuenta que había estado llorando
Toño: Nada – respondió y se tiro a su cama, Mar lo abrazo a la fuerza aunque Toño se retorcía para soltarse pero Mar lo apretó más fuerte
Mar: No ze está azin por nada – Toño ya estaba lo bastante enfadado y con eso se puso peor, ¿acaso no sabía porque estaba así?
Toño: Ziempre ze mete conmigo y tú la defiendes – y ese nudito que tenía en la garganta al hablar se convirtió el lágrimas que otra vez caían por su cara, malditas lágrimas ¿Por qué tendrían que salir?
Mar: No lo defiendo churri – le dijo Mar apenado
Toño: ZI lo haces… ziempre que pasa algo, a mi zi me pegas y el ziempre zale limpio, parece que él fuera tu hijo y yo no – dijo tan lastimosamente y bajando la mirada para que no vea lo que eso le afectaba y Mar tuvo que darse por entendido esta vez que sí, que su hijo estaba enfadado y que su enfado aun por infantil que fuera tenia peso en él y lo volvió abrazar
Mar: Pero no te castigue por lo de Chus
Toño: A ¿no? entonces shjss shjss veo alucinaciones – Mar le quiso acariciar la cabeza, pero Toño se hizo a un lado, al parecer esta vez no se lo pondría tan fácil
Mar: Toño lo hice porque te pones a gritar y lo estabas insultado – y Toño lo corto, ¿acaso a él no lo insultaba?
Toño: ¿Ves?, shjss shjs lo vuelves a defender sshjsszi shjs sshjss pero cuando él me insulta a mi no le shjss buuuuuaaa diiices nada – Mar empezó a darle besos en la cabeza y lo apretó más a su pecho
Mar: Yo no he escuchado que te insultara – y Toño lloro más fuerte, ya no quería estar abrazado a su papá pero Mar no lo soltó
Toño: ¡Claro! te haces el sordo… ¡me llama bebé! – le decía como si eso fuera un insulto monumental – me dice pulga pero a ti te da igual
Mar: No me da igual cariño
Toño: Mentiiiira, no serán malas palabras pero a mí me moleeesta, no me gusta que me llame asssiii, quiero que se vaya a su caaasa, cuando no estaba él antes era mejor – se puso a llorar y Mar tuvo que concederle la razón, puede que al resto no le moleste, pero era claro que a su hijo si y al parecer mucho como para pedir que se marche Chus
Mar: Te prometo que voy hablar con él – dijo papá, abrazándolo agradecido que no lo rechace como hace un momento, así que aprovecho para justificarte – no me gusta que os insultéis ninguno de los dos y no quiero que peleéis… zois primos, hijo – le decía limpiándole las lágrimas
Toño: Yo no quiero pelear, en el parque fue bueno conmigo yo creía que ya zi quería estar conmigo pero cuando bajaron de ducharse se fueron al patio con Lucas y yo también quería estar con ellos pero Chus no me dejó me dijo que era cozas de grandes y los bebés no podían escuchar – le conto y Chus que había subido porqué tardaban mucho y María le dijo que fuera a buscarlos cuando iba a entrar se detuvo en el pasillo y se le encogió el corazón al oír a su primo, él no pretendía hacer que Toño se sintiera así y no sabía ni porque lo hacía, simplemente era que a veces sentía un poco envidia de como trataban a Toño, de como era su vida…a él le hubiera gustado tener eso a la misma edad de Toño, no la responsabilidad que tuvo que cargar, por eso lo molestaba un poco pero tampoco quería que se sintiera así – y zi se me fue la lengua fue porque el me hace renegar con esos apodos – gimió
Mar: Cariño ellos son más grandes que tú, te llevan tres años y habrá cosas que no quieran hablar delante de ti por ejemplo de chicas y lo de llamarte bebé no lo hace por ofenderte – volvió a explicar, pero a Toño eso le supo mal
Toño: ¿Ves que lo defiendes de nuevo?
Mar: No lo estoy defendiendo, los chicos a su edad siempre dicen esas cosas – quiso explicar
Toño: Metira, Lucas nunca me dice cosas feas, no me ofende ni se mete conmigo…. Me respeta – agrego y Chus frunció el ceño, pensando en eso y tuvo que darle la razón, Lucas nunca le ponía apodos a Toño, podía ser porque no lo conocía de mucho o porque era la casa del novio de su hermana o como creía Toño porque lo respetaba y eso lo puso mal, por ahí ahora su tío decidía que se marche de su casa
Mar: Bueno hijo, no todos son iguales, y Chus se parece a su papá – le consoló sentándolo en su pierna – te voy a contar una coza – empezó papá creando ambiente como una complicidad entre su hijo y él, como un secreto – cuando yo era chico tu tío Luis me decía siempre “enano endemoniado” o “ pulga saltarina” también me quitaba el mando de la tele y ponía lo que él quería aunque yo estuviera viendo algo y no es que tu tío no me quería que luego cuando el abuelo se enfadaba conmigo y me iba a castigar me defendía a capa y espada y cuando era chico y rompía algo se echaba él la culpa y el abuelo lo castigaba a él – eso saco una sonrisa a Toño y también a Chus que todavía se ocultaba en el pasillo
Toño: Nunca se dio cuenta el abuelo – Mar recordó el día que su papá les dijo que no era tonto que él se daba cuenta y los iba a enseñar a no engañarlo
Mar: Zi ze dio cuenta y eze día nos fue muy mal
Mar tenía siete años y Luis trece, Antonio le dijo a Mar que no saliera al patio porque hacía demasiado calor y segundo por tener un resfriado de mil demonios, pero a Mar esa temporada le dio por mojar el suelo del jardín y jugar con el barro, es más incluso aquella mañana se había llevado un castigo por lo mismo.
Antonio le dijo a Luis que buscará a Mar mientras el ponía la mesa, Luis al no encontrarlo dentro de la casa ya sabía que se había ido al patio otra vez así que salió al jardín sin que su papá se diera cuenta, cogió a Mar como pudo en brazos y lo subió a la habitación de Mar pero Antonio estaba mirando por la ventana y vio como Luis cargaba a Mar, Luis le dio una ducha rápida y le puso otra ropa diciéndole a Mar que si le preguntaba su papá le dijera que estaba en su habitación Antonio espero pacientemente hasta que bajaron sus dos retoños.
Antonio: ¿Por qué tardaron tanto? – a Luis se le notaba cuando mentía desde mil leguas, se ponía nervioso y tartamudeaba
Luis: Estuvimos rec recogiendo los juguetes – Antonio miro a Luis y luego a Mar y jugó sucio con Mar se agachó a la altura de Mar para hablarle mirándolo fijo
Antonio: A ver ratoncito – Luis cerró los ojos ya sabía lo que iba hacer su padre y no iba a salir bien parado – ¿dónde estabas? – Mar miro a Luis pero Antonio le cogió la carita a Mar para que le prestará atención a él – no vale mentir porque papi se pone triste cuando su ratoncito le miente – y Mar cogió la cara de su papá con sus manitas una a cada lado
Mar: Yo no quiero que te pongas triste – le dijo con un puchero a punto de llorar y Luis ya se dio cuenta que iba a terminar llorando
Antonio: Pues dile a papá dónde estabas – Mar agachó la cabeza estaba defraudando a Luis pero tampoco quería que su papá estuviera triste
En ese mismo momento llegó Virginia la esposa de Antonio y la mamá de eso dos infantes cuando entro a la cocina y se encontró con esa escena a Luis nada más verla se le escaparon dos lágrimas que quiso quitar de inmediato pero papá y mamá se dieron cuenta, Virginia abrazo a Luis y Mar le respondía a su papá.
Mar: Estaba jugando en el jardín – Antonio siguió, esta vez le iba a demostrar a Luis que él se daba cuenta de todo, sabía que lo hacía con buena intención pero no estaba bien
Antonio: Pero zi no estás sucio – y Mar puso una gran sonrisa en la cara, pues su súper héroe lo había ayudado a bañarse sin darse cuenta que cada vez lo metía en más problemas
Mar: Me ha ayudado el Tete a bañarme y estamos jugando a un juego – Mar le decía tete a su hermano cuando era chico
Antonio: A zi ¿a cuál? – Mar volvió a reír
Mar: A no decirte la verdad – y con eso Luis se apretó a su mamá sabía que su padre estaría furioso
Antonio: A papá no se le miente PLAF PLAF – Mar puso un puchero llenándose los ojos en lágrimas al final su papá se enfadó aunque le dijo la verdad, Antonio cogió a Luis del cuello que estaba abrazado a su madre
Virginia: Antonio esta la mesa puesta – Antonio la miro
Antonio: ¿Crees que puedo dejarlo para luego? – le pregunto mirando a Luis que estaba llorando y a Virginia no le quedo más remedio que darle la razón, solo que sin decir una sola palabra le pidió algo que papá no tenía intención: que no fuera duro, total solo quería salvar a su hermanito de un castigo terminado siendo castigado él – dale de comer a este hombrecito que también quiero hablar con él
Tras aquello condujo a Luis a su propia habitación
Antonio: ¿Por qué hiciste eso? Luis
Luis: No quería que le pegaras otra vez, está mañana le pegaste y estuvo mucho tiempo llorado y no me gusta verle azin – y Antonio se lo quedo mirando fijamente, al principio cuando los vio en el jardín les iba a dar una paliza memorable a los dos para que no le mintieran pero ahora más calmado, se daba cuenta que lo hacía por su hermano… lo estaba protegiendo, no de la forma más correcta pero qué demonios tenia trece años, el también era un niño, tenía pensado mandarlo por el cepillo, pero ahora veía las cosas desde otro punto, se sentó en la cama tiro de Luis a su lado bajándole la ropa y lo puso en sus rodillas
Antonio: No quiero que me mientas PLAFF PLAF PLAF PLAF PLAF
Luis: AUUU ayyy shjs – Antonio le estaba dando más fuerte que otras veces, no quería hacerlo pasar mal le daría más fuerte y menos cantidad
Antonio: Hijo… yo no le voy hacer daño a tu hermano – le dijo sujetando su mano en la espalda – PLAFF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF – Luis que ya empezó a llorar no solo era porque le dolía, sino porque creía sinceramente que había decepcionado a su papá – PLAFF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF
Luis: Ya paaapii YAA, no te.. aggs agss ya no te volveré a decepcionar – Antonio paró le dio la vuelta a su niño sentándolo en sus piernas
Antonio: No cariño, no es así… tu no me vas decepcionar nunca – le dijo mientras lo apretó a su pecho besando su cabeza, pero Luis no hablaba, solo seguía llorando sin parar, como si no pudiera dejar de hacerlo – ya mi niño no llores así hijo – pero Luis no dejaba de llorar y su papá al final lo alzo en su regazo y lo meció hasta que se durmió de tanto llanto
Tras acostarlo bajo a la cocina un poco afectado, su mujer se dio cuenta que no estaba así por el castigo, pero no se atrevió a preguntar, además también tenía que tratar con su hombrecito pero a diferencia de Luis, fue más fácil calmarlo y fue recién que le conto a su mujer lo sucedido, lo que le había dicho sobre no volverlo a decepcionar y que estuvo mucho rato llorando, recordar aquello y analizarlo hizo que a Antonio se le fuera el apetito no quiso comer se le quito las ganas de ver a su niño en ese estado lo mismo que a Virginia que tampoco comió y quito la mesa; Antonio pero decidió mimar a su niño y le hizo chocolate que llevo en una bandeja con galletas y fue hablar con su niño, a decirle lo orgulloso que estaba de él, Antonio dejo la bandeja en la mesita y movió despacito a Luis para despertarlo, Luis abrió los ojos mirando hacia arriba cuando chocó con los de su papá y otra vez empezó a llorar.
Antonio: Suuuu ya zin llorar que no ze murió nadie
Luis: Lo ziento… yo no – ya no pudo seguir porque las lágrimas ahogaron sus palabras
Antonio: Ya mi príncipe, te va hacer mal tanto llorar – y le limpio las lágrimas dándole besos por toda la cara
Luis: Papá es que yo no quería verlo llorar otra vez – Antonio le beso la frente
Antonio: Ni a mí me gusta Luis, y verte a ti menos – se quedó callado pensando en que decir, al final solo quedaba decir lo que realmente pasaba – tienes que dejar que asuma sus responsabilidades
Luis: Es que es chico y se pone triste – y Antonio pensó de inmediato como tú y yo lo provoque
Antonio: Luis tu aprendiste de la misma manera – respondió besando su frente – nunca les voy hacer daño ni a ti ni a tu hermano, puede pazar lo de ahora… que os castigue pero nunca los voy a lastimar – Luis bajo la cabeza poco convencido, el era muy protector con Mar – mira te traje chocolate con galletas – y por fin a Luis se le puso una sonrisa en la cara, todavía era un niño al que con un dulce se le quitaba la penas – ¿quieres que vayamos al cine? – pregunto papá buscando la manera de compensarlo y Luis se quedó mirado a su padre
Luis: No papá, no quiero ir al cine a ver dibujos – Antonio se echo a reír, es que cuando salían todos juntos tenían que ver algo adecuado para Mar
Antonio: NO, no hijo solos tu y yo, podemos ir a ver esa nueva que me dijiste que salió – y Luis abrazo a su papá y eso le quito la pena del todo, claro está que a Mar le dijeron que iban al doctor porque Luis se había puesto malito
Mar: Mami y yo nos quedamos no vaya que se confundan y me pinchen a mi – le dijo tras abrazar y darle a su hermano un beso lleno de babas penoso porque le pincharan a su héroe, Antonio y Virginia se echaron a reír y Luis rodó los ojos
Mar se había quedado callado pensando en su infancia, estancando en sus recuerdos hasta que un tirón de su camisa y una voz chillona lo trajo al presente.
Toño: ¿Que pazo papi? – le pregunto curioso porque su padre habia empezando a contarle algo y sin embargo se quedo callado recordando su infancia
Mar: Nada que tengas que saber – y Toño se cruzó de brazos
Toño: Eso no se vale – reclamo y Mar lo cogió de la mano tirando de el
Mar: Anda hombrecito vamos a cenar que nos están esperando
Chus bajo las escaleras corriendo para que no se dieran cuenta que había estado escuchando, tras aquello todos cenaron tranquilos y vieron la tele un rato, claro está que el mando lo cogió Mar para evitar disputas y los mandaron a la cama cuando llego la hora de hacerlos mientras él se quedo con María en el jardín recostados en una tumbona muy acaramelados.
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