Sorpresas de la vida,capítulo 11

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 Sorpresas de la vida

 Autora: Terry y Caterin

 Capítulo11

 

 

Valentín  

Silvia 

Un profundo suspiro salió de los labios de Facundo mientras se dejaba serenar por el tierno semblante de su niño. Miró a su alrededor y no supo cómo había llegado a formar ese pequeño  no tan pequeño  hogar. Lo primero que pensó es que no le había comunicado a sus padres que iría a España y después tampoco les había hablado de Leo, a decir verdad ni los había llamado y conociendo a su padre sabía que iba a estar demasiado molesto con él por no haberles comunicado de su viaje.

Como vio que Leo seguía durmiendo con su guardián a su lado cogió el móvil y salió al jardín dispuesto a llamar a sus padres, estaba indeciso si llamar primero a su mamá o a su papá. Sabía que su papá le iba a echar la bronca de su vida pero gritaba menos que su mamá. Ella le iba a gritar en nada que sintiera su voz, así estaba con su móvil en la mano como si fuera un mocoso dándole explicaciones a sus padres, no como el adulto que era ¿porque tenía esos nervios en el estómago? 

Él era un adulto ¿Porque se sentía como si tuviera quince años y se hubiera ido de fiesta? Finalmente llamo a su papá, pero dieron todos los tonos y no cogió el teléfono ya no más así que llamo a su mamá quién atendió al tercer toque. 

• -Bueno?

• -Mamá, soy Facundo. _no le hizo falta que le dijera quién era, ella ya lo había conocido en la voz y rompió a llorar porque estuvieron muy preocupados hasta el día anterior, que su hijo salió en televisión en un noticiero diciendo que el guapísimo soltero, el famoso artista pintor estaba exponiendo en Madrid, España. 

• -Carajito, no sabes lo preocupados que estuvimos al no saber nada de vos._ Cuando dijo eso ya no pudo hablar más y le quitó el teléfono a su esposa que estaba al lado suyo sabiendo que era su hijo ya por lo que había escuchado 

• -Se puede saber qué pasó con vos, como se te ocurre irte y no avisar al menos. _Facundo se quedó cayado sin saber qué decir el no sabía que sus padres estaban así de preocupados –Boludo, te vas a quedar cayado?! 

• -Papá, yo no sabía que estaban así de preocupados. 

• Y como se supone que teníamos que estar cuando vamos para tu casa y no estás, no contestas las llamadas. Fuimos por varios días a tu casa y no estabas. No contestabas a los llamados, estuvimos en una angustia sin saber de tu paradero hasta ayer y todo eso porque saliste en el noticiero que si no, no sabemos de tu paradero!

• Lo siento papá, si no conteste a los llamados fue porque tuve un problema con la compañía telefónica y tuve que cambiar a otra y me cambiaron el número. 

• -No, mocosito, aún no lo sentís hasta que te vea de frente, ahora me das la dirección de tu hotel porque ya sé que estás en Madrid. Esta noche sale nuestro vuelo porque ya tenemos los billetes al enterarnos dónde estabas._ A Facundo no le salían las palabras, sus padres estaban demasiado preocupados como para comprar dos billete para ir a Madrid a la aventura, porque ellos ya los tenían comprado antes de que el los llamara. 

• -Papá, no hace falta que den ese viaje.

• -Mejor te callas porque no está el horno para bollos, así que ya me estás dando la dirección.

• -Esta bien luego te la mando por WhatsApp, pero es un viaje agotador. Son trece horas en avión, papá. _ no es que sus padres fueran unos ancianos, pero se sentía culpable que hicieran ese viaje por su culpa 

• -Hijo, esta tarde a las ocho tenemos que tomar el vuelo así que ya no hay vuelta atrás, y ya de paso conocemos un poco España ya que nunca hemos ido. _ el papá quiso quitarle hierro al asunto porque veía a su hijo con mucha culpa. 

• -De acuerdo, estaré en el aeropuerto para recogerlos, tengo que contarles algo importante.

• -¿Que es eso tan importante?._ le dijo Valentín con intriga 

• -Mejor mañana, papá, así se los explico mejor.

• -Está bien, cariño. Te dejo que si no tu mamá echa la casa entera en las valijas. _ Facundo sonrió sabía cómo era su mamá, sabía que su papá tenía razón. Un sentimiento se apodero de él, los echaba de menos. Colgó la llamada y entro a la casa viendo a Leo con un profundo sueño. 

No sabía si despertarlo para darle la merienda, pero al verlo dormir tan a gusto y ya se había comido un helado que decidió dejarlo dormir. Fue a la cocina a preparar la cena, mientras lo preparaba solo pensaba en cómo se lo iba a tomar sus padres cuando se enterarán que iba a adoptar a Leo. Puso los macarrones a cocer en una olla y también pensó que eso de comer así también iba a cambiar cuando su mamá llegará a la casa, ella era de comer más sano. Cuando puso los macarrones al horno fue a despertar a Leo porque si no en la noche no iba a querer dormir. Le costó bastante trabajo que Leo despertara, pero por fin lo logro y cuando estaban cenando, Facundo le estaba contando que sus padres venían mañana a España. 

• -Leo, hijo,estuve hablando hace un rato con mis papás._ Leo levanto la vista y la fijo en el mayor sin saber que decir -Mañana tenemos que ir a recogerlos al aeropuerto. _ Leo trago lo que tenía en la boca para hablar. 

• -¿Tus papás van a querer que yo sea tu hijo?_ le pregunto con temor a que sus padres no quisieran y ya no siguiera adelante el proceso de la adopción. 

• - Ya lo eres, y eso no lo puede cambiar nadie._ Le dijo, dándole toquecitos en la nariz 

• -Entonces ellos son mis abuelos. 

• -Claro que si. _con eso Leo sonrió de nuevo.

Cuando terminaron de cenar Facundo mando a Leo a que se bañara mientras el recogió la mesa y fregó los platos. Quería que todo estuviera impecable para cuando viniera su mamá, ya que era una fanática de la limpieza, no le gustaba el desorden. 

Cuando termino, fue al cuarto de Leo. Todavía tenía la conversación pendiente por haberse salido de la casa sin decir nada, Leo se estaba colocando el pijama. Ya tenía la camiseta puesta cuando Facundo entro, Leo le dio una sonrisa, pero Facundo no se la devolvió quería estar serio para lo que le iba a decir. 

• -Leo lo que has echo hoy a estado muy mal. _el chico bajo la cabeza porque sabía a qué se refería. 

-Es que estaba el perrito solo y nadie le iba a dar comida._ Facundo suspiro. 

-Eso no es excusa, Leonardo._ Este levanto la mirada para ver al mayor porque el nunca lo llamaba con su nombre completo, eso quería decir que estaba enfadado. 

• -Pero papi…. ¿que querías que hiciera? no lo iba a dejar desamparado y sin comida.

• -Leonardo sabes a qué me refiero. _le dijo un poco molesto por la actitud del niño.  

• No, no lo sé, porque no hay que te entienda._ Leo se estaba poniendo nervioso porque creía que ya no iba haber castigo, porque Facundo no había estado enfadado con el 

• -Bueno, si no te quedó claro, no puedes salir de casa sin permiso. 

• -Pues antes no me habías dicho nada_ Leo empezó a subir el volumen de voz. 

• -He he he, sin gritos._ Eso le dio más rabia a el niño 

• - Lo que pasa que antes querías quedar bien delante de esa puta que te has buscado._ Leo se dio la vuelta con el pantalón del pijama aún en la mano. A Facundo no le gustaba que hablaran así de una mujer y menos su mocoso de tan solo doce años 

• ¿Qué has dicho?

• ¿Acaso estás sordo? _ y eso es lo que bastó para tomar a Leo que le estaba dando la espalda. Lo cogió por la cintura apoyándolo a su cadera, Leo quedó elevado del suelo debajo del brazo del mayor, dejando su traserito expuesto a la mano de Facundo que aún estaba en boxer porque no se había puesto el pantalón del pijama. 

Plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas _por mucho que Leo pataleo y quiso soltarse del agarre de Facundo no pudo porque su fuerza era nula a la que tenía Facundo.

• Ya está bueno Leo, esa no es forma de hablar de un niño de doce años, y menos hablar así de una mujer. _ Facundo creía que con eso Leo se iba a calmar, pero paso todo lo contrario Leo estaba más rabioso y quiso patear a Facundo en la espinilla. Pero este, al ver las intervenciones, le paró la pierna lo cogió por la axila y lo llevo hasta la cama. Se sentó y puso a Leo sobre sus rodillas y le bajo esta vez el boxer. 

Plas plas plas plas plas a papá no se patea plas plas plas plas plas _ Leo empezó a llorar y Facundo le acarició la espalda hasta que vio que Leo estaba más calmado. Lo levanto, le dio un beso en la frente, y cogió una hoja y un lápiz que tenía Leo en su habitación de los que le había comprado Facundo para dibujar. Leo al ver las intenciones del mayor empezó a llorar más fuerte, sabía lo que iba a ocurrir ya que en la mañana le pasó igual. 

• ¡Papiiii!...no porfa _ Facundo odiaba cuando se tenía que poner en ese plan e ignorar los ruegos de su pequeño. 

• Ven aquí  _ le dijo Facundo señalando la silla del escritorio. Leo ya no quiso tentar más su suerte, no quería unas nalgadas de nuevo y camino frotándose el culito que hizo que Facundo se enterneciera aún más. Le escribió la primera línea "No se patea, y menos a papá." - Leo vas hacer veinte líneas. Cuando las hagas te podrás levantar. _ Leo empezó a escribir sin dejar de llorar, Facundo tampoco se movió de su lado, haciéndole caricias en la nunca para reconfortarlo o para reconfortarse el porque en ese momento se sentía un monstruo. 

Como eran solo veinte líneas, Leo no tardó en hacerlas y cuando Facundo vio que hizo la última lo cogió en brazos, sobándole la espalda dándole besos sobre su cabeza -Ya paso mi vida._ le decía para reconfortarlo, se fue a la cama y se sentó acomodando a Leo en sus piernas -Ya no llores, mi rey. _Pero Leo no dejaba de llorar. Le estuvo haciendo caricias durante un rato, pero no estaba haciendo mucho efecto porque Leo no se calmaba, hasta que Facundo dijo al parecer una palabra muy especial para el niño -Ya mi, Leoncito_ A Leo se le cortó la respiración, pero no pudo evitar sonreír porque esas eran las palabras que le decía su mamá cuando el lloraba por algo. 

Le decía "ya mi Leoncio no hay porque llorar " y eso lo calmaba como había pasado ahora mismo -¿Ya estas mejor? _ Leo afirmó con la cabeza. 

• -Hoy has sido muy malo. Me has castigado dos veces _ Facundo lo abrazo y le dio muchos besos en la cabeza 

• Leo, ahora no te iba a castigar. Solo iba a hablar con vos para decirte que no podés salirte sin decirme nada. No podés ir tan lejos vos solo, pero esa boquita tuya, y luego me ibas a patear de nuevo Leo. No podés comportarte así cada vez que te vaya a regañar. _ Le dijo con la voz suave- A ver decime ¿Porque tratas así a Beatriz? Que yo sepa solo nos a ayudado con todo. _ Leo bajo la cabeza. 

• -Es que no quiero que haya nadie más.

• ¿Nadie más? ¿A qué te referis?_ le dijo confundido 

• Si está Beatriz la vas a querer más a ella que a mí y al final otra vez tendré que volver a la casa hogar. _ Facundo le cogió la cara con ambas manos para que lo mirará a la cara, para que viera que se lo decía con sinceridad, que no le estaba mintiendo.

• -Leo, escuchame bien. Vos sos desde el día que te conocí mi primera prioridad, ni nada ni nadie te va a separar de mí y en segundo lugar entre Beatriz y yo no hay nada. Esa chica está siendo muy amable con nosotros y no está ayudando mucho, por eso tengo esos detalles con ella. Si está todo el día fuera ayudándonos a buscar una casa, lo más lógico es que la invite a comer y le de un detalle. No es porque entre ella y yo tengamos ningún romance, y si así fuera con ella o con otra persona vos siempre estarás en primer lugar, hijo, no temas por eso cariño, mi Leoncito _le dijo abrazándolo y dándole un beso en la mejilla 

¿Sabías que mi mamá también me decía eso? Mi mamá de verdad. 

¿A sí? No sabía cariño ¿La echas de menos?

-Casi no me acuerdo pero esa palabra si se me quedó grabada me lo decís para hacerme sentir mejor _Facundo le volvió a dar un beso en la frente, ya estaban recostados en la cama. Leo tenía la cabeza en el pecho del mayor y no tardó dos segundos en dormirse. Facundo quiso levantarse pero se dio cuenta que si se movía despertaba a Leo así que cogió la manta para cubrirse los dos.

A la mañana siguiente Facundo se levantó temprano para que les diera tiempo a ir a buscar a sus padres al aeropuerto. Cuando se reencontró con su papá y mamá se fundieron en un abrazo, pero Valentín se dio cuenta que su hijo había ido con una pequeña compaña 

• ¿Y este hombrecito de aquí quien es? _le dijo Valentín señalando a niño, y Leo ni corto ni perezoso se abrazo al hombre diciéndole 

• Abuelo…... 

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