一一一一一一一一一一一一一一一
Los derechos de autor de este texto pertenecen única y exclusivamente a su autor. No pudiendo ser publicada en otra página sin el permiso expreso del mismo.
一一一一一一一一一一一一一一一
Agridulce
Autora: Katy -Hikari
Capítulo:1 agridulce
Plafff
Ve en cámara lenta caer el pastel sobre su vestido, la crema se mezcla con la seda, mientras se resbala y al chocar con el suelo la masa se termina de despedazar...
Eduardooooooo -grito con todas sus fuerzas Leticia, mientras la ira se apodera de su ser.
El hombre corre rápidamente hacia donde se encuentra la mujer que minutos atrás juro frente al altar amarlo en la abundancia y la adversidad, mientras se pregunta a si mismo, si tolerar las travesuras de sus hijos hace parte de esa promesa.
-Amor... amor... ehhh ha sido... un accidente -dijo Eduardo mirando hacia todos los lados.
-Accidente!!!, llamas a esto un accidente, joderrr que todos vimos como ese par jalaron el mantel intencionalmente -grito furiosa
Valla forma de empezar su matrimonio, ya están listos para la foto familiar...
-Pero... amor son niños, además tu fuiste la que te atravesaste
-Ahhh ahora yo tengo la culpa, que querías que hiciera, que simplemente lo dejase caer, la puchaaa que era mi pastel...
Eduardo rodó los ojos, mientras mentalmente se repetía una y otra vez que esa fuese sido la reacción lógica, para el era un simple pastel, para Leticia era mucho mas que harina y crema, era un trozo de ella, su sueño, su logro, su esencia.
-Al menos salvaste el ultimo ponque -dijo en broma intentando calmar a su esposa
-Tienes el descaro de reirte eres el colmo.
-Lo siento Leti, de verdad lo siento, los voy a castigar pero mas no puedo hacer, aun no tengo el poder de reparar pasteles esa es tu magia.
Leticia por un momento bajo la guardia, ese hombre al final siempre lograba contentarla, aunque esta vez le costaría mas que unas palabras.
-Ya paso, era solo un pastel -dijo la mujer a regañadientes, mientras sentía como se atragabantaba con cada palabra, la puchaaaa que no era cualquier pastel, era el de su boda...
Leticia rápidamente miro a su alrededor y vio como los invitados habían estado viendo toda la escena mientras murmuraban entre ellos y decidió que la fiesta se había terminado, al menos perder su pastel le había dado la excusa perfecta para librarse de las víboras, sin querer una sonrisa se escapo de sus labios mientras pensaba que después de todo había sido un trato justo.
-Voy a despedir a los invitados, amor -dijo sin dejar espacio para ninguna objeción, ella ya había tomado una decisión.
-Y yo a encargarme de mis pequeños diablillos - respondió el hombre con resignación
-No seas muy duro con ellos -susurro mientras se regañaba a si misma por defender a ese par.
Leticia se acerco a donde su amiga Raquel y le pidió ayuda para despedir a sus "queridos" invitados y ambas con una sonrisa entre fingida y malvada empezaron con la ardua tarea...
Eduardo no sabia ni que sentir, por un lado estaba enojado, por otro lado sabia que debía mantener la calma y aunque jamas lo reconocería en voz alta la ocurrencia de sus pequeños por un momento le pareció graciosa, claro si lo escuchaba Leticia, seguro en ese mismo instante le pedía el divorcio y si los niños se enteraban intentarían ablandarlo, mas le valía guardarse eso solo para si mismo.
Se repetía así mismo que era una travesura de niños, una que había traído consecuencias atroces pero no por eso dejaba de ser una travesura, era mejor contar hasta 100 y tomarselo con humor, caramba a quien se le ocurría tirar el pastel de bodas, si solo a su par de diablillos, no quería ser duro con sus pequeños pero tampoco se los podía dejar pasar...
Con una pose seria fue hasta la esquina donde se encontraban los dos gemelos de 6 años hablando con su hermana de 13 años y al verlo acercarse se escondieron detrás de la niña.
-Leonel, Nicolas acompañenme al baño, tenemos que hablar -dijo con un tono neutro.
-Papá fue un accidente, por favor no los castigues -dijo Iris intentando defender a sus hermanitos.
Eduardo experimento lo molesto que era escuchar como otro intentaba disfrazar la traesura de los niños con esa excusa tan barata y estuvo a punto de repetir las mismas palabras de Leticia.
-No los defiendas y ustedes dos salgan que ya están metidos en un gran lió.
Los dos niños lentamente salieron de su escondite y se acercaron a donde estaba Eduardo.
-Papito nos vas a hacer pam pam -dijo Leonel formando un puchero .
-Niños lo que hicieron esta muy mal y tendré que castigarlos.
-Pero... papi -susurro Nicolas mientras sus ojitos se llenaban de lágrimas
-Vamos al baño mis corazones solo sera un momentito -dijo con ternura, tratando de tranquilizar a sus pequeños.
Eduardo tomo a cada niño de la mano y se dirigieron al baño, cuando llegaron el sollozo de los gemelos era audible.
Se agacho para quedar a la misma altura de los niños y los miro fijamente
-Niños me explican porque jalaron el mantel?
-Snif no... papi... fue un accidente snif -dijo Nicolas y en sus palabras se notaba la duda.
-No, Nico sin mentir -replico con tono serio Eduardo
-Papito snif, yo te digo la verdad pero no nos hagas pam pam snif por favor -intento negociar Leonel.
-Mis chiquitos no quisiera pero esta vez tengo que hacerlo -dijo acariciándole a la vez el pelo a sus pequeño-
Leo, cuentame porque lo hicieron, si mi vida.
-Papi, esta bien pero no te enojes... lo hicimos para que Leti se vaya para siempre, no queremos que sea nuestra mamá, no queremos...
-Buaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa -lloraron a la vez los dos gemelos.
Eduardo los abrazo a ambos fuertemente y por primera vez entendió porque Leticia, se negaba a que el obligase a sus chicos a llamarla mamá, ella no quería reemplazar a nadie ni menos forzar a los niños, comprendió que su decisión indirectamente afectaba a sus hijos y el cambio debía ser gradual.
-Mis chiquitos ustedes ya tienen una mamita, ella siempre estará en sus corazoncitos y los cuidara desde el cielo, que Leti sea mi esposa no cambia eso...
-Pero papi nosotros extrañamos mucho a mamita snif -dijo con una mezcla de tristeza y dolor Nicolas
-lo se pequeños, pero no por eso hay que portarse mal, yo quería que hoy estuviéramos contentos y disfrutáramos la fiesta, y con lo que paso ya se termino la celebración, para leti era muy especial ese pastel y ahora esta muy triste pero al único lugar que va a ir es a casa con nosotros, y a ustedes los tendré que castigar, cuando uno hace maldades lo que consigue es lastimar a las personas y se gana que papá les haga pam pam.
-No papi, pam pam no -dijeron a coro los gemelos
-Nico, ve hacia la esquina y mira la pared -dijo mientras tomaba la mano de Leonel y juntos se acercaban al inodoro, bajo la tapa y se sentó sobre este, para luego poner al niño sobre sus rodillas.
Plas plas
-Buaaaaaaaaaaaaaaaaaa
Plas plas
-A leti se respeta, no se le hace travesuras.
-Snif sere bueno papi snif pero no me pegues mas en mi colita, porfa buaaaaaaaaaaaaaaaaaa
Con cuidado le bajo el pantalón y los calzoncillos al pequeño.
-No papito, no...
Plas plas
-No massssss snif papito snif
Plas plas
Eduardo tomo entre sus brazos al chiquito y lo abrazo mientras le hacia caricias en la espalda.
-Ya bebe, ya paso mi leito, shuuuu, ya mi vida...
-Papito snif me perdonas?
-Siempre corazón, todo olvidado.
-Te quiero
-Yo a ustedes mas, cariño ahora ve a la esquina mientras castigo a tu hermanito.
-No le pegues duro, a mi me dolió mucho mi colita.
-Ya va a pasar el dolor mi vida -dijo y luego le dio un beso en la frente -no hagamos esperar mas a tu hermanito.
Eduardo acompaño hasta la esquina a Leonel, para luego girar a Nicolas, su pequeño se encontraba sollozando suavemente , había escuchado como le pegaban a su hermanito y se sentía muy triste, sabia que era su turno y no quería ser castigado.
Cuando Eduardo lo vio le partió el alma y lo alzo, el niño por su parte se abrazo rápidamente a el, luego llego inevitable, lo llevo al inodoro y lo puso sobre sus rodillas, dándole 8 nalgadas de intensidad media, tal cual había hecho con Leonel.
Después de castigar al pequeño lo tomo entre sus brazos y lo apretó fuerte contra su pecho, mientras le decía palabras de consuelo...
-Leo, ven aquí chiquito -dijo Eduardo cuando vio que el niño que abrazaba se encontraba un poco mas calmado.
Leonel corrió a donde su papá y cuando vio que esta tenia una pierna libre sin dudarlo se sentó sobre ella.
-Te duele mucho nito? -Pregunto mirando a los ojos a Nicolas.
-Mmm un poquito.
-Papá eres malo, muy malo -dijo Leonel viendo de forma acusadora a su padre.
-Diablillos sinvergüenzas -contesto mientras les hacia cosquillas.
Leticia y Raquel después de unos minutos lograron deshacerse de los invitados, claro Leti tuvo que soportar varios reclamos de la familia de su esposo, aun no comprendía porque la odiaban tanto, que mal les había hecho se preguntaba así misma, aunque pareciese irónico de todos quien mas la soportaban eran los gemelos, aja y estos le habían arruinado la boda mejor ni pensaba que podía hacer el resto.
Las dos amigas tomaron una botella de champaña y el ponque que valientemente había salvado Leticia y se sentaron cerca de donde se encontraba iris, pero no en la misma mesa, por instinto de supervivencia, cerca pero no tan cerca.
-Señora de Rodriguez has el honor de partir el pastel -dijo con burla Raquel mientras llenaba las copas de champaña.
-No empieces Quel, que no estoy de humor -respondió mientras pensaba con nostalgia que eso lo debía haber hecho junto a su esposo, como siempre soñó, sus manos juntas sobre el cuchillo sonriéndose mutuamente, para luego partir un trozo y el uno darle al otro a probar un bocado para finalmente jugar con la crema, mientras los demás aplaudían y tomaban fotos. No así, llena de crema y solo contando con la compañía de su amiga, en que momento su sueño se convirtió en pesadilla se pregunto a si misma, "aja, cuando decidiste casarse con un hombre con hijos" -susurro su conciencia.
-Eyyy por lo bueno de lo malo -dijo Raquel tomando una copa de champaña -Que quiero comer pastel.
-Si quieres comer pastel, andate a la pastelería.
-No, esta cerrada y hoy trabajo de payasa, ahora dame un trozo, que ya quiero saber que tan bueno quedo, o acaso estas esperando que también tiren a este chiqüelo.
- Y se supone que tu eres mi amiga?
-La mejor, anda cortalo o lo hago yo.
- Arggg, así termina tu corta vida bebe -dijo con pesar agarrando el cuchillo.
-Leti no es para tanto ya haremos otro pastel para tu aniversario y sera mas grande que este.
-La puchaaa Raquel sabes que no era cualquier pastel, tanto esfuerzo, tanto sacrificio, tantas horas, para nada, sabes que era lo único que me importaba de la fiesta, ese pastel era un pedacito de mi.
-Eyyy que yo también ayude, si vamos al caso también era mi bebe, y debió terminar en mi pansa no en el suelo, que en paz descanse, asi que en honor a sus hermanitos vamos a darle un buen mordisco a este y no mas lamentaciones, esa fue la ultima voluntad de sus hermanitos y que yo sea la socia mayoritaria de la pasteleria, porque ellos me querían mas a mi.
-Te pasas Quel, te pasas y ni lo sueñes en ultimas su deseo fue que yo sea la socia mayoritaria, ya sabes como regalo de bodas -dijo mientras reía por las ocurrencias de su amiga.
Leticia termino de partir tres rebanadas de pastel y fue a llevarle una a Iris.
-No quiero -dijo de forma grosera la niña.
-No te pregunte -respondió indiferente -mientras Iris le dirigía una mirada de odio -Oye porque me miras así jovencita, antes te traigo un trozo.
-Pues tragatelo, tanto show por un pastel, por tu culpa le están pegando a mis hermanitos -dijo con rabia.
-Pues si no querías que los castigaran no debiste decirles que jalarán el mantel.
Iris abrió una y otra vez la boca no se esperaba que la acusara tan directamente.
-Y que vas a hacer, vas a ir le con el chisme a mi papá, claro es lo único que sabes hacer, eres una bruja, te odio.
Sin entender porque a Leticia le dolieron esas palabras, estaba a punto de responderle cuando intervino Raquel.
-Eyyy dejala leti, nos libramos de las víboras, para no ser envenenadas, vamos a celebrar que ya eres la señora de Rodriguez. -Dijo la amiga con burla mientras le dirigía una mirada amenazadora a la niña y luego jalaba del brazo a Leticia.
-Por favor Quel, es solo una niña y tu, bueno tu eres un intento de mujer adulta, me recuerdas cuantos años tienes -le susurro Leticia cuando se encontraban nuevamente en su mesa.
-34 los mismos que tu y si cabe duda yo soy la madura...
Las amigas continuaron discutiendo y riendo mientras comían pastel y bebían champaña.
Iris las veía desde lejos furiosa mientras mil pensamientos pasaban por su mente: "Odio a ese par de brujas, sobre todo a la tonta de Leticia, la odio, no se que le pasa a mi papá, pero pareciera que no puede vivir sin una mujer en su cama, no le basto con la desgraciada de Verónica, sino que ahora mete a esta a nuestra casa, pero que ni crea que la voy a dejar hacer de las suyas, no ya no soy una niña y no voy a permitir que nadie lastime a mis hermanitos no, ellos no pasaran por lo mismo, ya veré como de deshago de esta, pero que lo hago, lo hago."
Después de un rato, Eduardo y los niños salieron del baño y se dirigieron al salón, para luego sentarsen junto a Leticia y Raquel
Leticia vio esos ojitos rojos y se sintió culpable, ya se le había pasado el enojo y comprendía que había sido una travesura, se moría por darles un abrazo pero al darse cuanta que la miraban con molestia, decidió ni siquiera acercarse.
Los niños miraban lo que quedaba del pastel con añoranza pero no se atrevían a pedirle un trozo a la bruja, después de un momento ella se percato de aquello.
-Niños quieren un trozo de ponque -pregunto Leticia en son de paz.
-A ellos no les gusta y a mi tampoco -respondió altanera Iris.
-Mejor ese sera el castigo por haber tirado el pastel -dijo con tono indiferente, mientras servía las rebanadas, por dentro deseaba que al menos los pequeños lo probaran, no quería ver esas caritas tristes.
Amiga gracias por esta nueva historia, estoy muy contenta porque la tengo en exclusiva no la pueden leer en otro sitio.tiene un argumento muy prometedor
ResponderEliminar👍
ResponderEliminarMe gustó la nueva historia, pero me parece que esa niña sera terrible para la chica que se caso con su papá, ya la estoy compadeciendo jajaja, y espero que la nena tenga protagonismo igual que la madrastra, me encantan cuando meten personajes femeninos en las historias, jajaj que diablillos los gemelitos, en espera de la conti.
ResponderEliminar